Después de sólo un día de descanso la actividad internacional de luchas olímpicas ha regresado este lunes al Pabellón Municipal de los Deportes de Pontevedra.
El Campeonato del Mundo Sub-23 de Luchas Olímpicas (libre y grecorromana) ha tomado el testigo de la competición de Grappling disputada la pasada semana. Por delante siete jornadas de emociones fuertes hasta el cierre del campeonato, previsto para el próximo domingo 23 de octubre.
Con cerca de 60 países representados, los mundiales sub-23 estrenararon su actividad con la modalidad de lucha grecorromana en cinco pesos (55, 63, 87 y 130 kilos).
Después llegarán los combates de lucha libre masculina y femenina, con especial atención el próximo jueves 20 de octubre con la gran esperanza en el Mundial de la lucha gallega y española, Nerea Pampín, la deportista de Vila de Cruces que entrena a diario en el Centro Galego de Tecnificación Deportiva y que fue quinta en el último Europeo Sub-23.
En cuanto a la jornada inaugural, la actividad se inició ya de mañana con las rondas clasificatorias, antes de la ceremonia oficial de inauguración celebrada a primera hora de la tarde y que dio paso a las primeras semifinales, en las que no hubo presencia de ningún deportista español.
Una ceremonia oficial en todo caso con la vista puesta hacia el futuro, y es que Pontevedra no se conforma con haberse convertido estos días en sede del mayor evento del año, por número de deportistas, de la Federación Internacional de Lucha (United World Wrestling). "Dentro de dos años volveremos a Pontevedra con un Mundial Júnior", recordó en su intervención el presidente de la Federación Española, Francisco Javier Iglesias, secundado en sus declaraciones por el alcalde, Miguel Anxo Fernández Lores, al señalar dirigiéndose a los deportistas que "agardo que esteades a gusto na nosa cidade e que poidades volver dentro duns anos sendo seniors, xa que agardamos acoller algún Campionato de Europa Absoluto".
Todo ello porque en la Boa Vila "seguimos candidatándonos a campionatos de cada vez maior categoría, porque Pontevedra é unha cidade do deporte", defendió el regidor acompañado de otras autoridades como el diputado provincial de Deportes, Gorka Gómez, el concejal de Deportes, Tino Fernández, y representantes tanto de la Xunta de Galicia como de la Federación Internacional.