"Tenemos ganas de revertir la situación. Parece que hemos alargado las vacaciones. Nos fuimos un par de días antes de San Sebastián de los Reyes y ya estamos en regreso". Son las palabras del entrenador del Pontevedra, Carlos Pouso, horas antes de retomar la competición liguera, en la que acumulan dos derrotas consecutivas. Los granates visitan el domingo (16.30 horas) al Coruxo, un rival directo en la lucha por un hueco en la parte alta de la tabla, que están a un solo punto de los de Pasarón.
No podrá contar Pouso con Berrocal, que sigue al margen del grupo por su lesión en el aductor, ni con el lesionado de larga duración Javi López. Tampoco estará Sana, sancionado, y será duda hasta última hora el central Víctor Vázquez. "Churre está entrenando aparte por un golpe en la rodilla y a ver cómo evoluciona de aquí a mañana para decidir", declaró el entrenador.
Sobre el rival del domingo, al preparador granate "me preocupa todo. Es un muy buen equipo. Bien trabajado defensivamente, con un medio del campo con calidad y trabajo y arriba tiene jugadores importantes como Silva, Añón o Mateo. Los partidos que le he visto en casa me encantó", declaró.
Una de las incógnitas en el once que planteará está en la delantera. En los últimos partidos Rivera parece haber adelantado a Javi Pazos como principal recambio de Adighibe, aunque Pouso no lo considera así. "Depende del tipo de partidos, son jugadores diferentes. Rivera es un hombre más de área y rematador, mientras que Javi es más de caídas a banda", argumentó.
El que parece que sigue teniendo toda la confianza del míster es el delantero nigeriano a pesar de su falta de acierto de cara a puerta de los últimos partidos. Reconoce Pouso que la mala racha que está pasando está afectando a la moral del atacante. "Los delanteros no ven la aportación que hacen al juego. Yo le suelo quitar presión y le digo tú haz esto. Y lo digo porque lo considero así", admite.
Aun así, reconoce el entrenador que "lo difícil del fútbol es hacer gol, por eso se le paga más al delantero que al defensa". Por esta razón, insiste en que "al que no mete goles, siempre hay que estar un poquito más encima y animarle. Adighibe es muy joven y tiene que entender que el fútbol es cuestión de rachas. Muchas veces chutas sin postura y la metes. Otras veces la tienes franca y le pegas al portero o se te va fuera. Hay que seguir trabajando, no tiene más solución", zanjó.