Dulce turrón estas navidades para el Pontevedra Club de Fútbol, líder sólido en el Grupo I de la Segunda RFEF y soñando con dar una nueva campanada a principios de año frente al Mallorca en la Copa del Rey.
Los granates, con su triunfo en Ávila, han asegurado el título honorífico de campeón de invierno, al llegar como primeros clasificados al término de la primera vuelta del campeonato.
Un título simbólico que no da ascensos pero que acerca a ellos, y que tal y como reconoció antes del último partido del año Yago Iglesias "a nivel anímico es una recompensa" que puede servir a la plantilla para "interiorizar y entender que se están haciendo las cosas bien y que este es el camino".
Se trata en todo caso de un hito que no ha sucedido demasiadas veces en la historia del club pontevedrés, ya es que es sólo la novena vez que lo consigue en sus 83 años de vida, sin contar en esos datos con sus dos primeros años de existencia y la temporada 57/58 (en las que militó en categoría regional).
De hecho es el segundo campeonato de invierno en lo que va de siglo, ya que la última vez que lo logró fue en la campaña 2014/2015 cuando militaba en Tercera División. Una temporada por cierto en la que terminaría ascendiendo a Segunda B.
Para encontrarse con otro equipo del Pontevedra como campeón honorífico invernal hay que retroceder hasta la década de los 80. Fue en la campaña 83/84, cuando llegó como líder en Tercera en un curso en el que también terminaría ascendiendo. En aquella ocasión era el tercer campeonato de invierno consecutivo puesto que también lo consiguió en la 81/82 y la 82/83 pero sin lograr a final de curso el objetivo de subir de categoría.
Las otras cuatro veces que el Pontevedra fue campeón de invierno fueron las temporadas 64/65 en Segunda División y 59/60, 47/48 y 46/47, todas ellas en Tercera.
Sin embargo los granates sí han sido muchas veces subcampeones simbólicos a mitad de temporada, por ejemplo hace un año cuando tuvieron a tiro el campeonato de invierno siendo superados finalmente por el Ourense CF. También era segundo el equipo de la Boa Vila en campañas recordadas como la 21-22 cuando ascendió a Primera RFEF (estaba a cinco puntos del Adarve) o en la 03/04 cuando firmó el hasta la fecha último ascenso al fútbol profesional, a Segunda División contra el Lorca (era segundo a dos puntos del Racing de Ferrol).
En esta lista no podía faltar tampoco el 'Hai que Roelo, y es que la mejor temporada de la historia granate, la 65/66 en Primera División, se llegó al ecuador de la liga en la segunda posición de la máxima categoría a sólo 3 puntos del Atlético de Madrid.
También al inicio de siglo XXI, con un Pontevedra dominador en la Segunda B y aspirante claro al ascenso, se firmaron cinco subcampeonatos de invierno, tres de ellos consecutivos entre 05/06 y la 07/08.