Manzanares, un equipo modesto ilusionado con su segunda presencia en el play-off

Pontevedra
02 de junio 2015

El equipo manchego disputa por segunda vez en su historia la fase de ascenso a Segunda B después de una temporada muy regular en la que sólo perdieron un encuentro en su estadio. Llegan a la segunda eliminatoria después de superar por penaltis al Lanzarote tras dos partidos sin goles

Partido del play-off entre Manzanares y Lanzarote
Partido del play-off entre Manzanares y Lanzarote / Rueda Villaverde / La Tribuna de Ciudad Real

El destino ha querido cruzar en el camino a dos equipos opuestos en trayectoria y ambiciones. Un Pontevedra que lucha por volver al lugar que por historia y afición merece y un Manzanares Club de Fútbol que vive un auténtico sueño.

El conjunto manchego juega esta temporada la segunda fase de ascenso a Segunda B de su historia, tras la disputada en la temporada 95/96, y lo hace tras una liga muy regular en la que finalizó en cuarto lugar de su grupo, el 18, correspondiente a Castilla La Mancha, siendo superado solamente por Talavera, Almansa y Quintanar del Rey.

A lo largo de las 38 jornadas los machegos, club de una localidad de apenas 20.000 habitantes a 50 kilómetros de Ciudad Real, sólo perdieron un partido en su estadio (jornada 9 ante el Almansa), ganando 12 y empatando seis.

A domicilio el equipo entrenado por Guillermo Alcázar presenta además unos números más que aceptables, con nueve victorias, cuatro empates y seis derrotas.

Lo más característico del Manzanares es la baja cifra de goles encajados, 24, que colocaron a su guardameta Rodri en el segundo puesto del zamora en su grupo, solidez que demostró en la primera eliminatoria del play-off dejando en la cuneta al Lanzarote, segundo clasificado del grupo canario, después de dos encuentros (prórroga incluida) sin goles.

En ataque el máximo goleador de los machegos es Raúl Castillo con 15 tantos, estando el resto muy repartidos por el resto de una plantilla en la que no destacan grandes nombres.

En cuanto a su estadio, el Campo Municipal José Camacho, se trata de una instalación de césped artificial con aforo para 700 personas y unas medidas de 102x70 metros.

Un equipo pues modesto que lleva cuatro años en Tercera División tras una larga travesía por la Regional Preferente y que ha recibido con buen agrado enfrentarse a un histórico del fútbol español como el Pontevedra, con la vuelta en un estadio como Pasarón que el Pasado domingo rozó el lleno con cerca de 12.000 espectadores en las gradas.