Mal partido y pobre empate del Pontevedra (1-1) frente a un Barbadás que fue mejor

05 de abril 2015

Si la primera parte realizada por el equipo local no puede catalogarse de satisfactoria, lo visto en la segunda estuvo a años luz de lo que cabe exigirle a un equipo como el granate, que se dejó superar en algo poco frecuente como es la concentración e intensidad con la que se debe disputar un partido. Bruno resulta lesionado con fractura de los huesos de la nariz en un choque con su compañero Campillo

Jorge consigue con este remate el primer gol del Pontevedra sobre el Barbadás en Pasarón Diego Torrado

Mal partido del Pontevedra, que dejó escapar dos puntos frente a un Barbadás con numerosas bajas, pero que supo aprovecharse de una pésima segunda parte de los granates para llevarse un empate más que merecido.

Si la primera parte realizada por el equipo local no puede catalogarse de satisfactoria, lo visto en la segunda estuvo a años luz de lo que cabe exigirle a un equipo como el granate, que se dejó superar en algo poco frecuente como es la concentración e intensidad con la que se debe disputar un partido.

Porque esa fue la clave. El Barbadás fue inferior en el primer tiempo, pero se lo creyó en el segundo y recibió el justo premio a su fe y ambición, ante un Pontevedra que careció de dirección y casi ni creó peligro ante la meta rival.

Luisito apostó de salida por un equipo con clara vocación ofensiva, confiando las bandas a dos laterales de largo recorrido, al situar en esa posición a Tubo por la derecha y Anxo por la izquierda, dejando que Jacobo y Mouriño partiesen de fuera hacia dentro para generar superioridad en la zona ancha y hacerse con el control de la pelota, en previsión de encontrarse, como así fue, un rival pertrechado atrás.

Pero el primer susto llegaba para el Pontevedra y lo hacía en forma de lesión, obligando a cambiar el planteamiento inicial. Era el minuto 13 cuando una falta de entendimiento entre Bruno y Campillo al intentar uno ceder al portero y el otro despejar, termina con los dos centrales contusionados, con una brecha en sus cabezas. Campillo volvería al campo con un aparatoso vendaje, pero Bruno se llevaba la peor parte, resultando con fractura de los huesos de la nariz, siendo rápidamente sustituido por Adrián.

El técnico local resuelve la situación cambiando la disposición táctica de su equipo, para pasar a jugar con un 4-2-3-1, retrasando a Kevin Presa al puesto de central, para dejar a Pablo Carnero por detrás de Jorge en ataque, con Mouriño como organizador. Pero el incidente no sentó bien al Pontevedra, que dominaba pero no llegaba con peligro, aunque tampoco pasaba apuros.

De ese modo, la primera ocasión seria tardaría casi media hora en llegar. Lo hizo a través de las botas de Pablo Carnero (minuto 26). Berto, en dos tiempos, consiguió neutralizar el peligroso disparo.

Como si fuese la señal que necesitaban los locales, cinco minutos más tarde Jorge abría el marcador. Lo hizo tras una falta lateral que botó Mouriño. Berto mide mal en el salto y no llega al balón, lo que aprovecha el delantero granate para rematar totalmente sólo en el segundo palo.

Luego Nacho Currás toca lo justo para evitar el remate franco de Campillo, de cabeza, que se va por encima del larguero y Jorge también remata alto, en posición muy forzada, un centro de Jacobo. Fue todo lo que dio de sí una primera parte en la que el Barbadás se limitó a defenderse a merced de lo que pudiese hacer el Pontevedra.

Pero los comienzos de la segunda parte presentaron un escenario radicalmente distinto. El Barbadás aprovechó la relajación y falta de intensidad con que regresaron los granates al campo para adueñarse del balón. Dieron un primer aviso (minuto 47) con un lanzamiento de falta a cargo de Luis, que se fue al larguero, para obtener fruto poco después (minuto 50), con un pase cruzado de Jaime que baja con calidad Isi para cruzar el balón por raso logrando el empate.

No acabó aquí el despiste granate, que siguió permitiendo que su rival creciese. Lo intentó Alfredo de lejos, respondiendo Edu. El Pontevedra dominaba, pero ese dominio era más aparente que real, sin profundidad ni peligro, tanto que el Pontevedra no disparó una sola vez a puerta entre los tres palos. Lo hizo Álvaro Muñiz (minuto 86), sin problemas para Berto.

El Barbadás, con el depósito vacío, cedía terreno, pero seguía aguantando sin mayores problemas, no tanto por su juego, sino por la pobre actuación de un Pontevedra partido y lejos de su mejor versión. Los ourensanos acabaron rotos y tendidos en el suelo, pero se llevaron un más que merecido punto que les acerca a su objetivo de la permanencia.

PONTEVEDRA CF (1): Edu (1); Tubo (0), Campillo (2), Bruno (s.c.), Anxo (2); Mouriño (1), Kevin Presa (2), Álvaro Muñiz (1), Jacobo (0); Pablo Carnero (0) y Jorge (1).

Sustituciones: Adrián (1) por Bruno, minuto 13. Fran Fandiño (1) por Tubo, minuto 60. Benja (1) por Jacobo, minuto 70.

UD BARBADÁS (1): Berto (1); Oli (1), Yago (2), Vieytes (2), Senén (1); Nacho Currás (2), Luis (2); Isi (2), Alfredo (3), Jaime (2); y Hugo (2).

Sustituciones: Rubén Arce (1) por Jaime, minuto 64. Lamelas (s.c.) por Isi, minuto 82. Jorge (s.c.) por Alfredo, minuto 93.

Árbitro: David Novás Benavides (Vigo), que sustituyó a última hora al colegiado inicialmente designado, Pablo Álvarez Calderón, por indisposición de éste, auxiliado en las bandas por David Veloso Prado y David Martínez Barciela. Amonestó a Mouriño y Benja, por el Pontevedra, y a Alfredo, Rubén Arce y Nacho Currás, por el Barbadás.

Goles: (1-0) Minuto 31: Jorge. (1-1) Minuto 50: Isi.

Incidencias: Estadio Municipal de Pasarón (Pontevedra). Unos 1.000 espectadores.