La historia se repite, y empieza a preocupar en el Pontevedra Club de Fútbol.
El acta arbitral del Pontevedra-Salamanca recoge en su texto una incidencia ocurrida en los últimos miunutos del partido, con el lanzamiento de una botella de agua al terreno de juego.
Sucedió en un momento de protesta general por no detenerse el juego tras la lesión sufrida por Cambil. Fue entonces cuando un aficionado de la grada de Preferencia arrojó al césped la botella, que fue recogida por el colegiado del encuentro.
"Se arrojó al terreno de juego, en una posición muy cercana a la que me encontraba yo, una botella de plástico con tapón y líquido en su interior, de 50cl, no impactando en ninguna persona", refiere el acta.
"Tras ello se activó el protocolo de lanzamiento de objetos al terreno de juego, comunicando dicha incidencia al delegado de campo, para que por megafonía se indicase que debían cesar estos comportamientos, como así fue hasta la finalización del encuentro", concluye la explicación del acta.
Con este texto se da por segura una nueva multa al club granate, previsiblemente como la última por "alteración del orden de carácter leve" con una cuantía que puede llegar hasta los 602 euros.
Será en ese caso la tercera sanción similar en menos de seis meses, tras lo acontecido en la final por el ascenso frente al Betis Deportivo y la más reciente contra el Bergantiños en liga.
En la primera de esas ocasiones la multa ascendió a 150 euros, mientras que en la segunda fue ligeramente superior. En este aspecto la reincidiencia juega ahora en contra de la entidad pontevedresa.