El mejor triatleta de todos los tiempos, Javier Gómez Noya, lo deja. Él mismo lo ha confirmado en un post compartido en sus redes sociales, en el que anuncia que "me retiro como atleta profesional al final de esta temporada".
Lo hace habiendo llevado al triatlón gallego, español e internacional a otro nivel, y colocando a Pontevedra como una de las referencias mundiales de su deporte. En su palmarés se lleva nada más y nada menos que una medalla olímpica (plata en Londres 2012) y nueve oros mundiales, con cinco títulos en la modalidad olímpica (el que más), dos de Ironman 70.3, un Xterra y el inolvidable Mundial de Larga Distancia conquistado en su ciudad en 2019 con Pablo Dapena secundándolo en el podio.
"Nunca es una decisión fácil y todavía me encanta entrenar todos los días pero mi cuerpo está sufriendo por asimilar la carga de entrenamiento que sé que necesito para competir al más alto nivel. Lo he llevado al límite durante muchos años y he tenido una carrera que ni en mis sueños más locos podría haber imaginado así que creo que es momento de seguir disfrutándolo pero con un poco menos de intensidad y estrés", relata Gómez Noya.
Centrado desde los Juegos Tokyo en la larga distancia, esta temporada ha intentado participar en el nuevo circuito T100 de la Organización de Triatletas Profesionales (PTO). "Os aseguro que he intentado con todas mis fuerzas estar preparado pero por un motivo u otro no ha podido ser posible. Por enfermedad antes de Miami, la pérdida de mi madre cuando me encontraba en Singapur, lesiones que me privaron de estar en Londres o rendir bien en San Francisco… Hice todo lo que pude pero no ha funcionado así que es momento de dar un paso atrás y tomármelo con más calma", relata Javi Gómez Noya.
Aún así "es posible que haga alguna carrera más este año pero no de altísimo nivel", avanza antes de dar "muchísimas gracias a todos por el apoyo durante todos estos años, ha sido un viaje increíble!".