El prematuro final de la temporada, que se dio por finalizada cuando todavía quedaban 10 jornadas por disputarse como consecuencia de la pandemia del coronavirus, obligó a los clubes a anticipar la planificación de la próxima temporada.
El primer movimiento en la plantilla del Pontevedra no tardó en producirse. El central cedido por el Leganés, Jaouad Erraji, anunció esta semana a través de las redes sociales su marcha del equipo de Pasarón.
El defensor llegó en los últimos días del mercado de fichajes de verano. Definido por la dirección deportiva como un jugador de gran proyección y polivalente que podía desenvolverse con solvencia en todas las posiciones de la defensa, incluso en la de pivote defensivo, el joven jugador tardó en acoplarse al equipo y no fue hasta la llegada de Pouso, tras el cese de Luismi, cuando se adueñó del puesto de central izquierdo.
En total, el central marroquí disputo 21 partidos con la elástica granate en los que consiguió anotar un tanto.
Desde la directiva del club guardan absoluto silencio en todo lo que rodea a la actualidad del primer equipo. AunquePontevedraViva pudo confirmar que la ronda de reuniones para renovar los contratos de la plantilla ya ha comenzado.
La mayor parte de los componentes del primer equipo finalizaban su relación contractual con el conjunto lerezano el 30 de junio, aunque el vínculo de algunos es más amplio porque firmaron un contrato de más de una temporada o porque se han cumplido las cláusulas para ampliarlo.
Entre los jugadores que, salvo rescisión unilateral o de mutuo acuerdo, que seguirán en el club están Eneko Zabaleta, Adrián Cruz y Rufo, que firmaron por temporada y media salvo el ariete, que lo hizo para tres cursos. Adighibe y Pol Bueso tienen también un año más de contrato, así como el capitán Edu Sousa y el central Víctor Vázquez que seguirán otro año bajo la disciplina del Pontevedra.
Además, muchos otros jugadores ya han mostrado su predisposición seguir en Pasarón y pelear la próxima temporada por clasificarse para el ascenso o, al menos, la clasificación para la nueva Segunda División B PRO, aunque tendrán que llegar a un acuerdo.
Además de la situación contractual del grueso de la plantilla, el nombre del entrenador que dirigirá al primer equipo es otra incógnita. Desde el club todavía no han confirmado la continuidad de Jesús Ramos, que se había hecho cargo del equipo de forma provisional hasta el final de la temporada.