El Pontevedra se aferra a la cláusula de rescisión ante el interés por Miguel Román

Pontevedra
08 de agosto 2022

El club granate ha recibido la llamada de dos clubes interesados en el prometedor centrocampista, pero no ha atendido por el momento a negociación remitiéndose a la cláusula de rescisión de su contrato, que asciende a un millón de euros

Miguel Román, en un entrenamiento del Pontevedra en el Estadio Municipal de Pasarón Mónica Patxot

Todos los focos en el Pontevedra Club de Fútbol miran en los últimos días hacia Miguel Román.

El centrocampista granate, de todavía 19 años, llamó la atención de muchos clubes la pasada campaña como una de las auténticas revelaciones del equipo granate que ascendió a Primera RFEF, un interés que no ha hecho más que crecer esta pretemporada ante sus últimas actuaciones, en especial la ofrecida el pasado sábado en Baltar en el duelo frente al Celta B, en el que marcó un bonito gol.

Con un año más de contrato en vigor en Pasarón, en las últimas fechas el club granate ha recibido el interés concreto de dos entidades de superior categoría para llevarse a Román. Uno de ellos ha llegado a materializar una oferta, que no ha sido tenida en cuenta por el Pontevedra.

La intención en la casa granate sigue siendo la de mantener en sus filas al '5', llamado a ser importante este año en su proyecto en Primera RFEF, una categoría que supone un paso adelante también para el jugador a nivel deportivo y que puede permitirle continuar con su meteórica progresión.

De hecho, desde las oficinas del Estadio Municipal de Pasarón se remiten de momento a la cláusula de rescisión que figura en su contrato, y que asciende a un millón de euros.

Eso no significa que Miguel Román termine haciendo las maletas, pero para que el club pontevedrés se abra a negociar su salida a poco más de dos semanas par que empiece la liga la oferta tendrá que ser elevada, aún a sabiendas de que el próximo verano el futbolista de Gondomar será libre para firmar con otro club, y teniendo en cuenta que el Pontevedra debería invertir parte de ese traspaso en encontrar un sustituto de garantías.

Todo ello salvo que el equipo que decida acometer su fichaje se abriera a su continuidad en la Boa Vila en calidad de cedido para la próxima temporada, una posibilidad que acercaría una inminente venta.