La luz al final del túnel empieza a asomar para el Poio Pescamar, mermado en las últimas semanas por las lesiones y que recupera efectivos para medirse este sábado (18.30 horas) en A Seca al Rayo Majadahonda.
El cuadro conservero, que todavía no ha conseguido ganar esta campaña ante su afición (dos empates y dos derrotas) buscará romper esa tendencia para intentar coger la ola positiva y recobrar impulso en su objetivo de pelear por la cuarta plaza.
"Antes del parón por las fiestas vienen partidos difíciles y varios todos juntos, así que espero que nos empecemos a hacer fuertes en casa", señala al respecto la argentina Agostina Chiesa.
Entre los efectivos que recupera esta semana el técnico Manu Cossío se encuentran Anna Escribano, Luisa Mayara y a la guardameta Caridad.
La cita llega para el Poio Pescamar colocado en la séptima posición con 12 puntos, a 5 de los puestos de play-off por el título y con dos más que su próximo rival, un Majadahonda que es decimotercero con 12 puntos y que acumula cuatro derrotas consecutivas en liga.