El centrocampista organizador, una pieza escasa y codiciada en el mercado

Pontevedra
31 de mayo 2019

El buen sabor de boca que ha dejado Borja Domínguez en Pasarón, en los apenas cinco meses de cesión procedente del Alcorcón, ha provocado que en Pontevedra se plantee como prioridad, además de la contratación de un delantero goleador, la llegada de un centrocampista que dirija el juego y aporte un salto de calidad al equipo

Borja Domínguez, en el partido entre Pontevedra y Rápido de Bouzas en Pasarón Diego Torrado

La primera semana de trabajo del Pontevedra Club de Fútbol en los despachos para planificar la próxima temporada se está centrando principalmente en las renovaciones, pero no por ello se deja de lado la búsqueda de los refuerzos con los que se intentará dar un salto de calidad.

En el primero de los aspectos, una amplia mayoría de de la plantilla ha recibido el interés de la entidad en que continúen. Con Churre se ha llegado a un acuerdo y con otros jugadores parece cercano, pero las negociaciones siguen abiertas en muchos casos y con pinta de prolongarse. Los que seguro que no seguirán son Mikel Arruabarrena y Nacho Lorenzo, mientras que existen muchas dudas con Pibe al pasar de sub-23 a ocupar ficha sénior.

Paralelamente la dirección deportiva peina ya un mercado que, hasta el final de la liga en Segunda y de los play-off marcha a ritmo lento. Aquí, a la espera de ver cuántas fichas sénior y sub-23 quedarán disponibles cuando se cierren las renovaciones, varias son las prioridades.

Una de ellas es la de cada verano, la delantera. Con Javi Pazos como único 9 actualmente con contrato, el Pontevedra intentará acertar en la contratación de un delantero que garantice un buen número de goles a final de curso, una de las asignaturas pendientes en las dos últimas temporadas. No será una negociación sencilla, ya que se trata de una de las demarcaciones más demandadas como demuestra que en los últimos años se esperó siempre a los últimos días del mercado con las llegadas de Mario Barco y Mateu Ferrer un año, de Berrocal el siguiente y de Aruuabarrena el pasado verano.

Otro de los objetivos será intentar incorporar un medio centro organizador, con peso en la creación de juego del equipo y que aporte un extra en la elaboración ofensiva. El buen sabor de boca que dejó en Pontevedra la cesión de Borja Domínguez en apenas cinco meses ha sido determinante para intentar buscar un recambio de similares características. Se trata sin embargo de un mercado exigente, complicado y codiciado, al existir pocos futbolistas específicos que se adapten a las prestaciones buscadas dentro del presupuesto que maneja el club.

El centrocampista vigués, que ahora regresa a su club de procedencia (Alcorcón) participó desde su llegada en invierno en 15 encuentros, los 13 últimos saliendo en el once titular. Durante ese tiempo Domínguez anotó 3 goles y el equipo granate sumó 9 victorias.

Este puesto creativo ha sido uno de los debes en la planificación de los últimos años precisamente por su dificultad, pero el nivel que alcanzó el equipo con la aportación de Borja durante la segunda vuelta de la liga ha reforzado la idea de que se trata de un puesto clave si se pretende aspirar a la zona noble de la tabla.

También llegarán refuerzos en la línea defensiva. Con la continuidad de David Castro confirmada y de Churre garantizada, dependerá eso sí de las renovaciones que se consigan cerrar en los próximos días, aunque todo apunta a que se buscará un central de garantías que aporte mayor solidez a la zaga.