El balón parado no es suficiente para un Arosa necesitado de gol (2-0)

O Salnés
26 de septiembre 2021

El Arosa ya no está invicto. Habían ganado los dos primeros encuentros de la temporada y empatado el último, pero el equipo arlequinado no puedo hacer nada para superar a la Gimnástica Segoviana en La Albuera en un partido poco vistoso en el que hubo pocas ocasiones y las únicas claras para los de Jorge Otero fueron de Mon a balón parado. Rafa Llorente adelantó a los locales a los 16 minutos de juego y Szymanowski sentenció en el descuento

Partido entre la Gimnástica Segoviana y el Arosa Gimnástica Segoviana CF

El Arosa ya no está invicto. Habían ganado los dos primeros encuentros de la temporada y empatado el último, pero el equipo arlequinado no puedo hacer nada para superar a la Gimnástica Segoviana en La Albuera en un partido poco vistoso en el que hubo pocas ocasiones y las únicas claras para los de Jorge Otero fueron de Mon a balón parado. Rafa Llorente adelantó a los locales a los 16 minutos de juego y Szymanowski sentenció en el descuento.

La primera oportunidad del partido fue a los cinco minutos y para el Arosa. Mon, de libre directo, sacó un disparo ajustado al palo derecho Pablo Carmona, que realizó una gran estirada para evitar el gol y enviar el balón a córner.

Pero tras el pequeño susto la Gimnástica Segoviana dio un paso adelante, llevando la batuta del juego y generando peligro en el área de Manu Táboas, protegido por una zaga muy activa y atenta que procuraba mantener la portería a cero.

Sin embargo, a los 16 minutos, tras una jugada a trompicones, Rafa Llorente fue el más listo de la cancha y pateó de primeras desde la frontal hacia la portería arlequinada, desde donde marcó un auténtico golazo con el que adelantó al equipo local. Por primera vez en lo que iba de liga, al Arosa le tocaba remar a contracorriente. 

Intentaron hacerse con el balón los jugadores dirigidos por Jorge Otero, pero el juego se ralentizó y ningún equipo fue capaz de generar peligro hasta los instantes finales. Ya en la recta final, el equipo arlequinado tuvo la opción de igualar la contienda con una falta lateral que Mon colocó al segundo palo, pero no hubo rematador y el colegiado pitó para enviar el encuentro a su descanso.

Después del paso por los vestuarios, concretamente a los 10 minutos de juego, Mon volvió a aparecer para intentar devolver las tablas al marcador pero, una vez más, Pablo Carmona sacó la mano para evitar el tanto arlequinado. 

Movió ficha Jorge Otero dando entrada a Pablo Porrúa y Luis Nuño, que sustituyeron a Pedro García y Julio Rey, buscando dar aire fresco a un Arosa necesitado de gol y que, con los cambios, buscaba, al menos, sacar algún disparo entre los tres palos que no fuera a balón parado.

Los minutos pasaban y los visitantes no se encontraban cómodos, mientras la Gimnástica Segoviana aguantaba el resultado con una defensa muy bien posicionada que se sacaba el esférico de encima buscando a sus delanteros a la contra.

El Arosa no daba para más y, ya en el tiempo de descuento, Szymanowsky robó la cartera a la defensa arlequinada en el centro del campo y corrió sin oposición hasta donde se encontraba Manu Táboas, al que batió de vaselina para sentenciar.