La plantilla del Pontevedra está de vacaciones navideñas. Pero el descanso no durará mucho. La clasificación para la siguiente ronda de la Copa del Rey trastocó los planes del cuerpo técnico obligando a acortar el parón y a duplicar el volumen de trabajo para preparar de la mejor forma posible el enfrentamiento contra el Mallorca y el importantísimo duelo posterior contra el Badajoz en Pasarón.
Los jugadores hicieron las maletas tan pronto como el colegiado pitó el final del encuentro en el que los granates eliminaron al Tenerife el pasado 21 de diciembre. Solo siete días después, los futbolistas volverán a verse las caras en el campo de entrenamiento.
Antonio Fernández citó a los suyos a las 10.30 horas del día 29 para una primera toma de contacto. La jornada continuará en sesión de tarde con un nuevo entrenamiento a las 16.30 horas. Y el plan se repetirá al día siguiente. El día de fin de año, la plantilla solo trabajará en el turno de mañana y tendrán descanso el día 1 enero para regresar iniciar el próximo lunes una nueva semana de entrenamientos con menor carga y con el foco puesto en la eliminatoria copera.
PLANIFICACIÓN SEMANAL | Unha semana de descanso e o xoves comezamos a preparar o partido fronte o @RCD_Mallorca de Copa do Rei con dúas sesións dobles de preparación #IzandoVelas#HaiQueRoelopic.twitter.com/mGdsgFxeKg
— Pontevedra CF (@PontevedraCFSAD) December 26, 2022
El objetivo de este parón no era otro que el de recuperar jugadores lesionados. El 2022 se cerró con la enfermería colapsada. Ángel Bastos, Diego Seoane, Miguel Román, Borja Domínguez, Alberto Rubio y Mario Ortiz arrastran diferentes molestias y todavía no está claro si van a poder estar a disposición del entrenador para el primer partido del año.
También tenía pensado el técnico aprovechar los primeros entrenamientos posvacacionales para seguir puliendo y mejorando el trabajo táctico, una misión a la que no podrá prestar tanta atención por el éxito alcanzado en la Copa del Rey.