Hace sólo tres años, en la temporada 2013-2014, peleaba por ascender a Primera División (fue cuarto en Segunda), cuando problemas económicos le condenaron a un descenso administrativo del que todavía lucha por recuperarse.
Ahora, el Real Murcia quiere retornar a la división de plata después de una liga en la que ha ido de menos a más, coincidiendo con los profundos cambios experimentados en el club a finales de año.
La llegada de un nuevo presidente, Raúl Moro, supuso una importante inyección económica. Por aquel entonces el equipo estaba situado en mitad de tabla sin cumplir con las expectativas levantadas al principio de liga, y la directiva se puso manos a la obra. Hasta 10 fichajes se realizaron en el mercado invernal, con nombres importantes como los delanteros Sergi Guardiola y Víctor Curto, el centrocampista David Sánchez o el extremo Rayco, entre otros, propiciando la salida de otros tantos futbolistas entre los que se encontraba el exgranate Borjas Martín.
Desde ese momento el equipo ha empezado a carburar poco a poco, sobre todo tras el cambio de entrenador. Vicente Mir sustituyó a Paco García y también salió el director deportivo y viejo conocido del Pontevedra, Guillermo Fernández Romo. Con Mir al cargo, el Real Murcia ha encadenado 10 jornadas sin perder, con 8 victorias y dos empates, pero en el global de la competición los murcianos llegan al play-off con un impresionante registro de una derrota en las últimas 16 jornadas de liga, alcanzando la segunda posición del Grupo IV en la fecha definitiva.
Con todo los números del cuadro pimentonero reflejan una cifra anotadora igual a la del Pontevedra (48 goles), mientras en contra encajó 29 (por 36 de los granates). En su estadio, la Nueva Condomina con aforo para más de 30.000 espectadores, logró la mayor parte de sus puntos en liga (43) con 13 victorias, 4 empates y sólo 2 derrotas, mientras a domicilio sumó 24 puntos con 6 victorias, 6 empates y 7 derrotas.
Entre los aspectos a descatar de la plantilla, en la que se encuentra el canterano pontevedrés Adrián Cruz, está el poderío ofensivo que aportan dos de los fichajes invernales, Sergi Guardiola y Víctor Curto, que han anotado entre los dos 16 tantos desde su llegada al club, 8 cada uno de ellos.
Llegará el Real Murcia en plenitud al Estadio Municipal de Pasarón, con la única baja del lesionado Isi e inmerso en un estado de euforia que rodea al club, pero eso no amedrenta a un Pontevedra que confía en poder avanzar en la fase de ascenso a base de ilusión y trabajo.