El ciclo Ponteatro echa a andar esta semana con una primera cita con las entradas agotadas. Se trata de 'Iribarne', una revisión de la figura de Manuel Fraga en clave de humor escrita por Esther F. Carrodeguas y con dirección de Xavier Castiñeira.
Este espectáculo de ButacaZero ya colgó el cartel de ‘entradas agotadas’ en Vilalba y Santiago de Compostela y lo volverá a hacer este jueves, 8 de febrero, a las 20.00 horas en el Pazo de la Cultura de Pontevedra.
La expectación generada por esta obra ya se vivió también en Madrid el pasado otoño, donde la pieza estuvo en cartel un mes completo, agotando todas las entradas y alcanzando el aplauso unánime del público y de la crítica.
Ahora, en la provincia de Pontevedra, ya tiene fechas confirmadas en Vilagarcía de Arousa (24 febrero), Tomiño (20 abril) y Cangas (4 mayo).
La obra está escrita por Carrodeguas, que la presenta como "un intento (irreverente) por comprender como llegamos hasta aquí caminando de la mano de uno de esos personajes secundarios pero increíblemente imprescindibles de nuestra historia". Según ella, es "el trabajo más difícil que escribí hasta ahora" y añade que "fue complejo encontrar el punto de equilibrio del humor, del estilo, así como el lugar desde lo que se situar".
Castiñeira, responsable de la dirección, señala que "este personaje es inabarcable” y “entiendo lo que hizo, pero no desde dónde lo hizo y por qué lo hizo", y destaca las contradicciones que fueron encontrando durante el proceso de investigación, tanto de su biografía personal como de su trayectoria política.
Ambos señalan que pertenecen a una generación, la de la Transición, que creció rodeada de un "silencio tácito alrededor de la historia política reciente", y que embarcarse en este proyecto los ayudó a entender de dónde venimos. "Me parece muy interesante que la obra, que se sustenta sobre el silencio, abra puertas al diálogo, aunque sea para provocar controversia", apunta Carrodeguas.
El montaje está articulado en tres episodios, que reflejan la evolución política de nuestro país, desde el franquismo hasta la transición y la democracia, para culminar con el período de hegemonía de Fraga en Galicia. "Nos pareció que un político que había ocupado cargos de alta responsabilidad y que se mantuvo en el poder a lo largo de un período tan dilatado podría ser un personaje interesante para hablar sobre la identidad de España", señala la dramaturga.
La puesta en escena ofrece, con ritmo frenético, un juego coral en el que todo el elenco -integrado por Xurxo Cortázar, Jorge de Arcos, Esther F. Carrodeguas, Mónica García, Anxo Outumuro y Lidia Veiga- se va dando el relevo para interpretar al protagonista. Se trata de una "pieza extremadamente teatral, muy loca, muy divertida de ver", afirma su director.
En la obra hay hueco para todos los iconos pop de las diferentes épocas, desde Palomares hasta Salomé, Massiel, Serrat... pasando por episodios más trágicos, como Grimau, los asesinatos de ETA o la muerte de Franco. "Recorremos desde la infancia hasta la muerte de Fraga, y eso es toda la historia reciente del país", afirma Castiñeira. "Pero no estamos intentando hacer Historia ni un biopic, sino darle una vuelta muy cómica y contemporánea, mirando desde aquí y desde el ahora, sin acritud, el pasado", concluye el director.
Completan el equipo artístico Diego Valeiras, que firma el espacio escénico junto al propio Xavier Castiñeira y el vestuario, Diego Vilar, a cargo de la iluminación, Pablo Fontenla, responsable de la parte audiovisual, la coreógrafa Sabela Domínguez y el productor musical Berto, creador de la banda sonora original de la obra, que incluye el single Who the f*ck is Iribarne?