En poco más de 24 horas ¡Qué desilusión! se subirá al escenario de la Plaza de España. Será el primer grupo pontevedrés en abrir los conciertos de las Fiestas de la Peregrina. Es uno de los grupos de la escena musical de Pontevedra con mayor proyección. Fueron los elegidos en el certamen 15 Bolos. Una cuestión de suerte, como reconoce Charlie, su guitarrista "porque en Pontevedra hay cinco o diez grupazos que podrían estar ahí y estarán algún día".
ÿl es uno de los dos 'alma mater' de la banda. Al otro, Adrián (voz y guitarra) lo conoció mientras estudiaban en Santiago. Los últimos en llegar han sido Alberte (bajo) y Rubén (batería). Este es un verano muy especial para ellos porque además de telonear a Mago de Oz (sábado 10 de agosto, 22.30 horas) también han tocado en el festival SonRías Baixas (Bueu). "Las dos oportunidades más grandes que hemos tenido hasta ahora", explica Adrián.
Si os parece, empecemos por el principio. ¿Cómo nace Qué desilusión?
Charlie: Adri y yo estábamos estudiando en Santiago. Nos conocimos y empezamos a ensayar en su casa. Allí compusimos las primeras canciones. Pensamos en montar un grupo y buscamos un batería y un bajista. Así llegaron Rober y Luis, que venía desde Pontevedra para ensayar. Poco después, por obra y magia del destino acabamos en Pontevedra. Yo ya era de aquí y Adri se vino a vivir. Alberte entró en el grupo después de marcharse Luis, que se tuvo que ir a Londres a trabajar. Para el batería venirse le era imposible y tuvimos que buscar otro, luego otro y al final llegó Rubén. Esa es la historia. Una amistad entre dos chavales que coinciden y con el tiempo se va profesionalizando hasta acabar en donde estamos.
¿Tuvisteis siempre claro el estilo de música por el que queríais apostar?
"Siempre escuchamos a Barricada, Rosendo, Los Enemigos, Platero y tú, todo esto que se llama rock estatal o rock urbano. Y fue lo que nos salía"
Charlie: Es lo que siempre hemos escuchado y lo que siempre hicimos. Siempre escuchamos a Barricada, Rosendo, Los Enemigos, Platero y tú, todo esto que se llama rock estatal o rock urbano. Y fue lo que nos salía. Si tuviésemos que tocar jazz, por mucho que nos pusiéramos no nos iba a salir. A nosotros nos salía este rock que hacemos, un rock de la calle. Siempre hemos hecho esto. Las canciones que surgieron en aquel piso son las que están grabadas en este CD. Y las que están saliendo ahora en el local de ensayo, serán las siguientes.
Adrián: Nos puede salir un tema un poco más diferente que otros, pero el grupo tiene ese sonido, ese rock clásico más estatal y aunque tiremos hacia otro estilo más americano, al final acabamos volviendo a ese sonido. Puede que hayamos variado la rítmica un poco, sobre todo con la entrada de Alberte y Rubén que nos lleva hacia un sonido más internacional. Nos vino bien porque marcas cierta diferencia, pero siempre sonamos a rock estatal.
Me imagino que, como cada grupo similar al vuestro, los inicios fueron complicados. ¿Me equivoco?
Adrián: Todos veníamos de otras bandas y sabíamos un poco lo que había, pero todo inicio es duro porque conseguir medios y tener un buen equipo es difícil. Tener disponibilidad para ensayar es difícil porque uno estudia, el otro trabaja es difícil cuadrar horarios. Y poder mantener un local de ensayo es igual de complicado. Y eso que nosotros tuvimos suerte al encontrar un local de Barro que nos sale gratis.
Charlie: Crear un grupo es fácil, juntas a cuatro amigos y empiezas a tocar. Lo difícil es mantenerlo con los años. Se te va una persona y tienes que buscar a otra y no hay nada más difícil que lograr que vuelva a funcionar el grupo. Es desesperante. Y luego llegan los discos, los conciertos Es duro económica y personalmente. Pierdes de hacer muchas cosas, aunque lo compensas con lo que te da la música. Nos llena, nos da lo que nos hace mejores personas.
"Tener un grupo es duro económica y personalmente. Pierdes de hacer muchas cosas, aunque lo compensas con lo que te da la música"
El año pasado grabasteis vuestro primer disco, A golpe de alfil. ¿Sentisteis que era el momento adecuado, que teníais material suficiente?
Adrián: Lo grabamos en febrero del año pasado. Llega un momento en el que sientes la necesidad de que tienes que grabar un disco. Es el paso que debes dar si quieres pasar del circuito de pequeños bares y empezar a tocar en salas y festivales. Hay muchos grupos, la competencia es muy grande y era necesario tenerlo. Lo grabamos en dos días, porque teníamos poco dinero. Le metimos mucha caña y quedó bastante bien. A la gente le gustó. Tuvimos mucha suerte porque no es fácil tener tanta repercusión con un primer disco.
Tras la grabación del disco llegaron al grupo primero Alberte y luego Rubén. ¿Os adaptasteis bien a la dinámica de la banda?
Alberte: Yo cuando entré fue justo cuando acababan de grabar el CD. Me lo pasaron, me aprendí las canciones y pista. No hubo mayor problema. Una vez están grabadas las canciones sólo tienes que aprenderlas y listo. No hay más. Yo ya venía de otros grupos y sabes cómo es la mecánica. Simplemente había que tirar para adelante.
Rubén: Evidentemente cuando hay algo grabado y llegas tú, tienes algo de miedo de ver qué le parece tu trabajo a la gente. Siempre te haces esa pregunta cuando entras en una banda que ya está formada. A mí el disco me encantó, tenía un sonido que me gustaba y todas las canciones eran originales. Por eso también me metí con ellos. Y ahora que entro yo hay un trabajo a asumir por mi parte, que las baterías del siguiente disco suenen igual de bien.
Ahora que el grupo se ha consolidado y tenéis ya cierto reconocimiento, ¿cómo afrontáis el futuro?
Adrián: Tenemos pensado grabar otro disco para primavera o verano del año que viene. Es importante estar ahí. Hay grupos que graban un disco y luego desaparecen un par de años. Nosotros creemos que lo mejor es seguir tocando todo lo que podamos y ver si tenemos suerte y sacamos alguna fecha más en salas grandes o festivales.
"Tenemos pensado grabar otro disco para primavera o verano del año que viene. Es importante estar ahí"
¿Es difícil entrar en ese circuito?
Adrián: ¿En el de festivales? Sí, mucho. A ver si ahora con las producciones que tenemos en verano, que ya son más grandes, llegamos a más gente y nos resulta algo más accesible. Al final todo se resume en moverse, conocer gente que vayan hablando de ti y poder tener un acceso más fácil.
Muchos artistas se quejan de que la crisis económica haya hecho que los promotores cada vez arriesguen menos. Para grupos emergentes como el vuestro será un hándicap brutal
Adrián: Es una cosa muy de aquí, pero creo que lleva pasando unos 30 años. Hay grupos que tienen que estar siempre como Rosendo, Barricada, Obús, Barón Rojo, Boikot. Reincidentes... Es casi seguro que vas a ir a un festival y van a tocar un par de ellos. Muchos promotores no arriesgan. Pueden pensar hay ahí unos chavales que tocan muy bien, pero me traen a 100 personas. Y si traigo a los otros, a dos mil o tres mil. Y ahí está el problema. Pero bueno, están surgiendo muchos grupos y parece que empieza a renovarse, que hace falta.
Todos los conciertos serán importantes para vosotros, pero hay dos fechas que habréis marcado en rojo en el calendario: el SonRías Baixas y el concierto con Mago de Oz.
Adrián: Son las dos oportunidades más grandes que hemos tenido hasta ahora. Nunca tocamos con grupos tan grandes. Por un lado, no contábamos con la oportunidad del SonRías. Decidieron que había que hacer una fiesta de presentación y que mereceríamos estar en ella. Y lo de Mago de OZ, es la hostia. Estamos hablando de una producción muy grande.
Alberte: Y además, con respecto al concierto de Mago de Oz, Adri no que es de O Barco, pero nosotros somos de Pontevedra de toda la vida. Desde pequeños íbamos a los conciertos de la Peregrina y decíamos cuando empezamos a tocar, tocar aquí sería impresionante y ahora vamos a cumplir ese sueño. No hay palabras.
Muchos os señalan como uno de los grupos emergentes con mayor proyección de Pontevedra. ¿Esa etiqueta os supone una presión añadida?
Charlie: No creo que seamos el grupo de mayor proyección de Pontevedra. A lo mejor de nuestro estilo pues sí, pero tampoco hay muchos grupos que hagan rock urbano. Pero luego hay grupos que cantan en inglés o psicodélicos como The Grave Dolls, Thee Blind Crows, Salvation Army son grupazos que podrían estar ahí y van a estar. Algún día estarán. Ahora mismo en Pontevedra hay cinco o diez grupos que podrían haber estado en ese escenario con Mago de Oz. Yo lo valoro como un factor de suerte. Para el año van a estar otros.
Sea como sea, lo cierto es que Pontevedra se ha convertido en cuna de un gran número de bandas de gran calidad, grupos que con pocos medios y mucho esfuerzo se están abriendo un hueco
Charlie: Es ley de vida. Hubo un grupo de gente que con el Local de Música empezó a ensayar y se creó una especie de comuna musical. Somos grupos que nos conocemos y nos apoyamos en todo lo que necesitemos. Lo de Pontevedra yo nunca lo había visto. Llevo 22 años viviendo aquí y nunca vi este boom de grupos, jóvenes de entre 18 y 35 años con tanta calidad.
"Desde pequeños íbamos a los conciertos de la Peregrina y decíamos cuando empezamos a tocar, tocar aquí sería impresionante y ahora vamos a cumplir ese sueño"
Alberte: Con la apertura del local de música, hubo un momento en el que toda la gente de mi edad, ahora 19-20 años, empezó a tocar. Y ahora es cuando se ve, cuatro o cinco años después que hay una serie de grupos de bastante nivel que salieron gracias a eso y que antes no había.
Charlie: Es normal que si haces una cantera de música rock, a la larga surjan grupos que se lo tomen en serio o que tengan la suerte de ir para arriba. Es lo que está pasando ahora. Este momento tenía que llegar, a ver en qué acaba. Estamos entusiasmados de que haya este nivel aquí. Todos los días hay conciertos en Liceo Mutante, en Karma, en Pontemuíños e iniciativas como 15 Bolos crean un ambiente musical tremendo. Pontevedra vive una época de oro.
Citas los 15 Bolos, todos los grupos señaláis la importancia de eventos como este. Es importante para vosotros, supongo, porque os permite llegar a público nuevo, ¿no?
Charlie: Cuando el rock lo llevas a la calle, logramos que nos conozcan otras personas fuera del ambiente musical en el que nos movemos. Ven grupos nuevos y escuchan la música que tocamos. Y si ves el cartel, es algo tremendo, Cualquiera de los grupos podrían estar en cualquier escenario o festival. Muchos de ellos llegarán a donde quieran llegar.
Adrián: Y además, es gratis. (se ríe) Poder acceder a conciertos en abierto y que no haya que pagar es genial. Puede cuadrar un promotor de fuera que te vea y luego te llamen de otro lado. Que te puedan conocer porque sí, porque estaban aquí en ese momento y les gustaste. Pero también te digo una cosa, entiendo la situación económica de la gente, pero si realmente te gusta la música malo será que no encuentres unos euros para ir a un concierto.
Charlie: Y te digo más, si alguien a quien le guste ¡Qué desilusión! no viene a vernos por dinero, nosotros le damos una entrada y le dejamos pasar gratis. Que ese no sea un motivo para no venir a nuestros conciertos.
Vosotros apostasteis siempre por la autoedición, por hacerlo todo vosotros mismos. ¿Creéis que es el camino a seguir en el sector?
Charlie: Nosotros somos nuestros propios managers, y creo que por ahí irá el futuro. La industria ha cambiado, muchos se autoproducen. Se acabó eso de que venga una discográfica te ponga miles de euros encima de la mesa y te lleve a grabar a Houston. La promoción, la producción todo lo tienes que hacer tú. Y eso implica aprender a aguantar que te digan muchas veces que no. Los sí son muy pocos.
En este sentido, ¿Internet os ha ayudado?
Adrián: Sin duda. A nivel promoción es el medio más grande, más que la radio o las revistas. Todo el mundo está pegado al ordenador. Y se mueve todo por ahí.
Charlie: Es una herramienta más, pero como digo siempre no es la panacea. No es que hagas una web y ya triunfes. Internet es como un océano. Hay miles de grupos y que den contigo es más que una casualidad. Eso sí, puedes provocarlo. Esa es la promoción más efectiva. No sirve sólo estar en Internet. Es puro marketing. Hay que dar algo al público y llegar a la gente a la que crees que le puedes interesar.
"Sólo falta que toquemos nosotros y vayan otros de teloneros. Pasará, eso esperamos, pero será dentro de unos años"
¿Y habéis notado ya el fenómeno fan?
Adrián: A nivel local sí, no sólo amigos, sino también por gente que te ve un día en la prensa y te sigue. Y luego nos sigue mucha gente de diferentes puntos de España. Lo que nos pasa por Facebook es increíble. Hay gente de País vasco y Alicante que te piden la camiseta antes que alguien de aquí, que cuelgas algo y ya están compartiendo, lo mueven y te sorprenden, Que te apoyen tanto es alucinante.
Rubén: Hay gente que te coge cariño. Pontevedra es una ciudad pequeña y que un grupo de aquí, que tira por la ciudad, vaya logrando ciertas cosas, pues la gente se alegra. Te van a ver a los conciertos, te ven por la calle, te paran
¿Y en casa? ¿Siempre os han apoyado o al principio no se creían que esto fuese en serio?
Adrián: A mí ahora como que me dan una oportunidad. Me dicen espera a ver hacia donde vais y empiezan a reconocerte un poco. A los 14 años le decías que ibas a ensayar y protestaban. Ahora, la familia cuando me ve siempre me pregunta dónde voy a tocar y me apoyarán lleguemos hasta donde lleguemos.
Charlie: Mis padres siempre me apoyaron. Fueron los que me compraron la primera guitarra, los me animaron a seguir en muchos momentos. De hecho, flipan que vayamos a tocar en la Plaza de España. Me dicen que ya estamos en lo máximo de Pontevedra. Parece una broma, pero es así. Sólo falta que toquemos nosotros y vayan otros de teloneros. Pasará, eso espero, pero será dentro de unos años.