Durante mil quinientos años los descendientes de los hombres y mujeres que arribaron en el siglo I A.C. a la isla de Tenerife crearon una civilización aislada del mundo hasta que los nueve reinos del territorio guanche pasaron a ser objetivo de los Reyes Católicos.
El escritor y guionista de cine y televisión Santiago Díaz cambia de género con 'Los nueve reinos' tras publicar novela juvenil y negra con la exitosa serie de la inspectora Indira Ramos.
Remarca en el podcast ‘Cara a cara’ que se trata de “una novela histórica a mi manera”. Esto significa que “lo he hecho con ritmo de thriller, tratando de demostrar que una novela de corte histórico no es sinónimo de aburrimiento. Hay acción, tramas cruzadas, historias de amor, de todo un poco”.
Como escritor le ha resultado más retadora “porque era el reto de contar la historia de los aborígenes canarios”; y más compleja, “por llegar a esa documentación ya que la mayoría fue escrita por cronistas castellanos un siglo después de la conquista”. El resultado está siendo gratificante a tenor de la respuesta que va recibiendo del público lector.
Fue en el siglo XV cuando el mencey (rey) Bencomo reúne a los nueve menceyatos (reinos) de Tenerife para luchar contra la Corona de Castilla, de manera que en la narración aparecen los reyes Isabel y Fernando y también el navegante Cristóbal Colón, quien recaló en las islas sin objetivos conquistadores y acabó conquistado.
Presenta a una reina Isabel como mujer, "enamorada de Fernado de Aragón que era un poco viva la virgen y la hace sufrir". Otra de las mujeres históricas que también tiene sus andanzas en la novela es la cortesana Beatriz de Bobadilla, que "enamoró a los tres hombres más importantes de aquella época".
Y un personaje inanimado, pero trascendente en este libro, reflejado en la portada, es el volcán del Teide. "Los guanches creían que era la morada del diablo y temían que sangrase. Para ello lo agasajaban con el sacrificio de animales o con el de personas. Era fascinante el embrujo que tenía en aquella sociedad", explica.