El concello de Cerdedo-Cotobade acogió este sábado el homenaje a José Cerviño García "Pepe da Pena", considerado uno de los mejores canteros y escultores gallegos de finales del siglo XIX y principios del XX al que se le atribuye, entre otras obras singulares, los cruceros de Hío y Covelo.
El portavoz de la Coordinadora Pro-homenaje a José Cerviño, Maximino Fernández Sendín, encabezó la numerosa comitiva de familiares amigos y representantes del mundo de la cultura y de la sociedad del Verdugo-Oitavén, entre los que estaban los alcaldes de Cerdedo-Cotobade, Jorge Cubela y de A Lama, David Carrera; la diputada autonómica Loli Hermelo, miembros de la Corporación Municipal de Cerdedo-Cotobade como el teniente de alcalde Fernando Vázquez y los concejales Galicia Aguete y Ernesto Filgueira, así como el concejal lamense José Ogando.
Jorge Cubela ensalzou la figura y la obra de José Cerviño a quién calificó de "mestre de mestres canteiros" y destacó el gran trabajo artístico hecho por muchos lugares de Galicia "dando boa conta da súa alta cualificación e mestría así como bo gusto levando con orgullo o nome de Aguasantas e Cotobade, agora Cerdedo-Cotobade, co gran nivel das súas obras á altura do mellor barroco galego".
Después de la ofrenda floral ante su panteón la comitiva se desplazó hasta la casa natal de José Cerviño García, para proceder al descubrimiento de una placa conmemorativa y hubo una pequeña presentación dramatizada por Manuel Domínguez "O Bruxo Queiman" quien glosó la vida y obra del insigne cantero.
Tomó también la palabra el promotor del homenaje, Maximino Fernández Sendín, director de la Casa Museo Etnográfico Pazo da Cruz y el Centro de Estudios de A Paradanta y O Condado, quien agradeció la colaboración y la implicación en este acto de la Asociación de Vecinos Penelas, de Aguasantas, y del Concello.