Sin margen para el error. Así afronta el Club Cisne Balonmano la fiesta del balonmano gallego, el segundo derbi de la temporada frente al Balonmán Cangas que se disputará este sábado 15 de abril (17.00 horas) en el Pabellón Municipal de los Deportes.
A seis jornadas para el final de la competición y con 12 puntos en juego, los pontevedreses están a seis puntos de la zona de salvación, una zona que marca precisamente un Cangas rival directo en el objetivo.
"Es un derbi más bien de urgencias", reconoce el segundo entrenador del Cisne, Quiños, sobre un partido "que el que gane va a salir reforzado aunque no sea definitivo".
Quiños ha alabado a su próximo rival, del que destaca "una buena 6-0, juegan bien las transiciones y en ataque son pacientes para encontrar los huecos", aunque como en todo duelo de rivalidad "el que consiga gestionar mejor los malos momentos y los nervios se llevará el gato al agua".
Todo ello dentro de un ambiente de gala que se espera en el Pabellón Municipal, con importante presencia de seguidores visitantes.