Libasse Gueye está de vuelta en Pontevedra. Más de dos meses después de su desaparición, se fue de vacaciones por Navidad para no regresar, el extremo senegalés se dejó ver el pasado sábado por Pasarón.
Al finalizar el partido, el entrenador Juan Señor y Charles, uno de los capitanes del equipo, se refirieron a la situación del atacante en términos muy distintos. Mientras el técnico le abría la puerta a su reincorporación al grupo, el delantero brasileño, visiblemente enfadado, prefirió morderse la lengua y tratar el asunto de modo interno en un discurso que deja entrever que el vestuario, que se siente traicionado por un compañero, no quiere a Gueye de vuelta.
"Mejor no hablar, vamos a hablar internamente. Me callo y ya está, por el bien de todos. Vamos a disfrutar de la victoria", declaró uno de los pesos pesados del vestuario al finalizar el partido contra el Algeciras.
Una declaración muy distinta a la del técnico, al que este nuevo episodio del caso Gueye lo cogió por sorpresa. "Me han comentado que está aqui y puede estar a mi disposicion, será un jugador más y bienvenido. Siempre y cuando esté en condiciones porque ni lo he visto, ni lo conozco", declaró sin hacer referencia a su desaparición.
Vendo o triunfo do @PontevedraCFSAD estivo Gueye despois de 70 días desaparecido
— En Xogo tvG2 (@EnXogo_tvG2) March 12, 2023
Señor "Pode estar á miña disposición. Será un xogador máis. Benvido si está en condicións"@Charlesbrau9 "Mellor non falar. Vou calar polo ben de todos"
Deixariádelo volver? pic.twitter.com/gnMSBhyaVJ
Este lunes, el Pontevedra regresaba a los entrenamientos para preparar el partido del próximo sábado frente al Linares pero entre los jugadores citados no estaba Libasse Gueye.
Minutos después del inicio de la sesión de trabajo, la directiva del Pontevedra emitió un breve comunicado en el que informaba de la celebración de una reunión entre el futbolista y directivos de la entidad para "tratar sobre las decisiones a tomar por su ausencia".
El culebrón Gueye comenzó después de las vacaciones de Navidad, cuando el extremo africano no se presentó a los entrenamientos con el grupo.
Durante más de un mes, el equipo trabajó con su ausencia sin que ningún responsable dijese nada sobre qué estaba pasando. Fue tras el cierre del mercado de invierno cuando la presidenta Lupe Murillo se refirió por primera vez al caso Gueye para decir que "está todavía sin cerrar. No le hemos dado de baja, sigue teniendo ficha, no hemos llegado a ningún acuerdo el dia del cierre de fichajes. A ver si llegamos a un acuerdo los próximos días. En los próximos días habrá un desenlace", dijo Lupe, que en aquel momento se debatía entre la "incredulidad de que vuelva y si queremos que vuelva". En su discurso, también reconoció que en el seno del club ya temían su fuga porque estaba descontento con los minutos que estaba jugando, unas sospechas que finalmente se hicieron realidad.
Un mes después de la comparecencia de la mandataria granate, Gueye regresó a Pontevedra para resolver su situación, que pasa por su reincoporación al grupo, su despido o que cumpla su contrato apartado de la dinámica del primer equipo. Está por ver también que consecuencias contractuales o qué sanción le impone el club por todo lo ocurrido.
Otro agravante en todo este culebrón fueron las provocadoras publicaciones del senegalés en redes sociales, dando me gusta a algunas publicaciones del que es todavía su club y publicando enigmáticos mensajes relacionados que avivó el enfado de una afición furiosa por lo que entienden como una imperdonable falta de respeto a un escudo con más de 80 años de historia.