Ver para creer. Dominó el Cisne el partido de principio a fin, llegó a colocarse con una ventaja de cuatro goles, pero a la hora de la verdad, se desinfló por completo.
Y es que el Sinfin fue a remolque durante más de 59 minutos, pero se sostuvo sobre un Mohamed Aly disfrazado de héroe que, con una actuación casi impecable, salvó a su equipo de una derrota que sobrevoló la pista en todo momento.
Con pocos goles y protagonismo de los guardametas. Así comenzó el duelo entre Blendio Sinfin y Club Cisne Balonmano, donde ambos equipos disputaban un duelo vital por la permanencia en Liga Asobal.
Apoyado en un Kilian Ramírez que había realizado cinco paradas en apenas seis minutos, el cuadro pontevedrés tomó la primera delantera en el luminoso. Sin embargo, los locales también tenían bajo palos un muro con Mohamed Aly, que mantenía vivo a su equipo y evitaba que el partido se rompiera.
Sin embargo, los desajustes ofensivos del Sinfin obligaron al técnico a parar el cronómetro en el minuto 16, cuando el partido iba 4-7.El egipcio apareció por partida doble deteniendo los lanzamientos de Carlos y Furtado y los cántabros respondieron con un 2-0 que comprimía el marcador.
Y tras unos minutos en los que el Sinfin buscó el empate, éste llegó. Corría el minuto 23, José Manuel Herrero hizo el 9-9 y el técnico pontevedrés pidió tiempo muerto. Y así, tras dos ataques en los que ambos conjuntos conectaron con el gol, llegó el punto de inflexión.
Diego Monzón se sentó dos minutos en el banquillo y con los goles de Chan, Pombo y Furtado y una parada de Kilian, el Cisne recuperó el colchón de tres goles a falta de dos minutos para que finalizara el primer tiempo, pero Mohamed Aly, sobresaliente bajo palos, apareció para que los suyos recortaran distancias para mandar el partido al descanso en un ajustado 13-14.
Salió como un revulsivo de los vestuarios el equipo de Lérez y el Sinfin se mostró con numerosos problemas para encontrar opciones en ataque. Kilian alcanzaba las 13 paradas, el Cisne se colocaba con otro tranquilizador +3 y los cántabros tardaban más de ocho minutos en anotar con un tanto de Alberto Pla.
Era el egipcio Mohamed Aly el que mantenía con vida al Sinfin con ocho paradas en la segunda parte, pero sus compañeros continuaban nulos en tareas ofensivas y pasaban a encontrarse con una losa de cuatro goles (14-18) hasta que, alcanzado el ecuador, lograron recortar las distancias, previo tiempo muerto solicitado por Javi Márquez (16-18).
Calin Dedu anotó, pero a partir de ahí el color del encuentro cambió. Los de Rubén Garabaya no querían perderle la cara al encuentro y enchufaron un parcial de 2-0 con el que se pusieron a solo un gol aprovechando la brillantez de su guardameta, que ya sumaba 20 paradas y un 50% de efectividad. Chan devolvía el +2 para el Cisne y Garabaya paraba el tiempo a falta de seis minutos para la conclusión.
Kilian detenía el ataque rival, Cavalcanti estrellaba su lanzamiento con la defensa y los cántabros, con Herrero Lon, recuperaban la esperanza y las opciones de victoria (19-20).
Iba a ser un final de infarto. Sinfin se quedaba con uno menos y el Cisne fallaba cuando no tenía que hacerlo, Herrero Lon anotaba el empate y Franceschetti se iba al banquillo por estrellar el balón en la cara del guardameta local.
El partido estaba loco. Los de Garabaya no supieron gestionar sus opciones y cometieron falta en ataque, dando opciones al Cisne de retomar la delantera, pero los nervios los condenaron y cedieron el balón a su rival a falta de 40 segundos para el final.
Fue en ese momento cuando el Sinfin, después de más de 59 minutos yendo por detrás en el marcador, remontaba con un gol de Nicolás Bono con el que los locales firmaron el 21-20 final.
Duro varapalo para el Club Cisne que tuvo claras opciones de sumar dos puntos vitales por la permanencia pero se vio superado por un Mohamed Aly soberbio bajo palos con un 52,38 % de efectividad y 22/42 paradas.
Consulta las estadísticas en este enlace