La Sociedad Deportiva Teucro vive jornadas importantes para su futuro, lejos de los focos de la cancha de juego.
Más importante si cabe que su futuro deportivo tras su descenso a la Primera Nacional es garantizar la viabilidad del vicedecano del balonmano nacional. En este sentido el segundo proceso electoral convocado en la entidad deportiva pontevedresa en los últimos meses tenía este lunes 20 como último día para la presentación de candidaturas.
Sin interesados a ocupar la presidencia, todo pasará de nuevo por una junta gestora, pero con un matiz. Los integrantes de la actual directiva, tras muchos años al mando, quieren dar paso a nuevas caras.
"Nadie va a seguir si no hay savia nueva que entre", resume en nombre de sus compañeros de junta gestora el también ex-presidente teucrista, Carlos García-Alén.
"El requisito para que continuemos es que de el paso gente nueva", asegura mostrando la intención de los actuales dirigentes de seguir apoyando al club pero cediendo protagonismo.
En este sentido "hay dos o tres socios que cuentan con entrar en la gestora, pero como mínimo debían entrar media docena de personas nuevas", resume pidiendo implicación a la masa social del Teucro para evitar su liquidación.
En las manos de la nueva junta gestora, que se tendrá que conformar en los próximos días, estará afrontar el resto de cumplir con los últimos plazos de vencimiento de la deuda concursal con la Agencia Tibutaria, que suponen un total de 119.717,98 euros a pagar entre este mismo año (59.858,99 euros) y el 15 de abril de 2023 (otros 59.858,99 euros), y también recomponer el proyecto deportivo desde la tercera categoría del balonmano nacional.