"No ha sido un invierno sencillo, ni mucho menos, pero ha merecido la pena y mucho", señalaba recientemente Pablo Dapena en sus redes sociales desde la concentración iniciada a modo de pretemporada tardía. El triatleta pontevedrés, que retrasó su inicio de año para centrarse en la familia tras ser padre, reconocía que "es hora de darle la vuelta a la tortilla" con el objetivo de recuperar "la esencia, la motivación y las ganas de superarse".
Dapena se ha establecido en el complejo Sands Beach de Lanzarote desde el 28 de marzo, acompañado de su familia, para afinar su puesta a punto de cara a una temporada que iniciará en el mes de junio.
"Es bastante más tarde que otros años, pero la situación es la que ha sido y no vamos a pedir más", señala a PontevedraViva el campeón del Mundo de triatlón de larga distancia disfrutando de esta nueva fase. "Antes venía a Lanzarote con la gente del centro de tecnificación y ahora vengo con la familia y sinceramente igual este sitio lo disfrutas más con la familia", asegura.
Aunque las sesiones son habitualmente en solitario, sigue a rajatabla la programación establecida por su nuevo entrenador, el neozelandés Dan Plews, con la vista puesta en las primeras carreras importantes de su calendario de 2022, que serán el Challenge Gdansk el 19 de junio y el Campeonato de Europa 70.3 de Elsinore el 26 del mismo mes, competición en la que "fui tercero hace unos años y va a ser complicado ahora con el nivel que hay revalidar podio pero vamos a intentarlo".
Antes, para llegar a tono, planea probarse en una travesía a nado en Lanzarote y en un triatlón olímpico en Mallorca el 28 de mayo, que coincidirá con la concentración prevista en la isla balear por su equipo, el Team BMC.
En cuanto al resto de la temporada aparece marcado en rojo el Campeonato del Mundo ITU de Triatlón de Larga Distancia, que se celebrará en Samorin (Eslovaquia) el 21 de agosto en un formato más reducido de lo habitual en los últimos años con un recorrido de 2.000 metros de natación, 80 kilómetros de ciclismo y 18 kilómetros de carrera a pie, muy diferente a la distancia Ironman de 2021 en Almere (3,8 kilómetros de natación, 180 en bicicleta y 42 a pie). "Habrá que reconvertirse a rápido", señala al respecto Dapena.
Otras citas en las que espera participar, aunque pendiente de su ránking, son las carreras de la PTO en Edmonton (23-24 de julio) o Dallas (17-18 de septiembre), además de valorar si participar en el Europeo que tendrá lugar en Bilbao (17-24 de septiembre) o en el Challenge Budva (25 de septiembre).
Lo que es seguro es que el pontevedrés no peleará este año por el World Bonus que reparte Challenge porque "no dan los números" al tener planificado como mucho tres apariciones en las carreras de la franquicia, incluyendo el 15 de octubre el Challenge Peguera de Mallorca.