La resonancia magnética a la que han sido sometidos Róber y Álex Cobo tras sus preocupantes lesiones de rodilla el pasado domingo en Luanco han confirmado algunos de los peores temores en el Arosa.
Ambos jugadores estarán alejados un tiempo de los terrenos de juego y deberán pasar por el quirófano, aunque especialmente grave es el caso de Róber.
El atacante sufre una rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla derecha, según ha confirmado su club, siendo el periodo de baja estimado para esta dolencia de entre seis y ocho meses. Todo un palo para un futbolista importante en los planes de Jorge Otero.
Menos grave, aunque no por ello deja de ser importante, es la lesión del Álex Cobo. Según explica el Arosa el guardameta sufre una rotura en el menisco externo de su rodilla, sin afectación en los ligamentos. En su caso deberá someterse a una artroscopia que esperan desde la entidad arlequinada se pueda acometer en los próximos días para acortar en lo posible su tiempo de baja, estimada en mes y medio o dos meses en función de su evolución.