El calor de Tokyo asfixia las opciones de Gómez Noya, que finaliza en el puesto 25

Pontevedra
26 de julio 2021

El triatleta gallego llegaba a los Juegos Olímpicos con la ambición de pelear por el podio, pero sufrió con las duras condiciones en las que se desarrolló la prueba cediendo comba en el inicio del último sector, de carrera a pie, y diciendo adiós a sus opciones de medalla

Javier Gómez Noya, con Fernando Alarza y Mario Mola, durante la prueba de triatlón de los Juegos Olimpicos de Tokyo
Javier Gómez Noya, con Fernando Alarza y Mario Mola, durante la prueba de triatlón de los Juegos Olimpicos de Tokyo / Comité Olímpico Español

Las condiciones extremas de calor y humedad de Tokyo han terminado por fundir las esperanzas de medalla para Javier Gómez Noya.

El triatleta gallego había preparado a conciencia su tercera experiencia olímpica, concentrándose previamente en la isla mexicana de Cozumel, pero nadie sabía cómo se podía desarrollar la carrera individual masculina más abierta de los últimos tiempos.

La prueba se disputaba a las 6.30 horas de la mañana en Japón para minimizar en lo posible esta circunstancia, aunque con el agua a 30 grados de temperatura desde el inicio empezó a dibujarse una carrera de supervivencia.

Gómez Noya sufrió desde el primer sector, con una natación de 1.500 metros que completó en el medio del pelotón de participantes a 43 segundos del francés Vincent Luis, uno de los hombres a seguir. Junto a él salían del agua los otros dos representantes españoles, Mario Mola y Fernando Alarza, quedando encuadrados tras la transición en el tercero de los grupos que se formó.

Tocaba remontar en los 40 kilómetros de ciclismo, con 8 vueltas a un circuito muy técnico y con un grupo cabecero que peleaba por mantener su ventaja. En los primeros giros esas diferencias parecían estabilizarse, pero con el paso de los kilómetros la buena colaboración entre los perseguidores acabó posibilitando la neutralización pasado el ecuador del sector en bicicleta. Un respiro para el pentacampeón mundial en modalidad olímpica y plata en Londres 2012, que se mantenía en la pelea.

Sin embargo la última transición empezó a marcar el final de sus opciones. Noya no consiguió colocarse en los primeros puestos del numeroso grupo y salió ligeramente rezagado en los compases iniciales de los 10.000 metros de carrera a pie, un grupo en el que tampoco entraban Mola y Alazarza.

Por delante el británico Alex Yee marcaba un ritmo fuerte con el noruego Blummenfelt a su estela, y la distancia empezó a hacerse insalvable. Era de 22 segundos al final de la primera de las cuatro vueltas de carrera prevista y de 44 al término de la segunda. Las medallas se alejaban irremediablemente.

Al final Kristian Blummenfelt se proclamó campeón olímpico con un tiempo de 1:45:04, superando en un bonito final al británico Yee y al neozelandés Hayden Wilde, plata y bronce respectivamente. Javi Gómez Noya por su parte no pudo pasar del puesto 25, entrando en meta 2 minutos y 42 segundos del vencedor.