Como si de un juicio escabroso se tratase, el Pontevedra Club de Fútbol ha decretado un estricto secreto de sumario en lo que respecta a la planificación de la próxima temporada, empezando por las renovaciones de los futbolistas que terminaban contrato este mes.
El club granate lleva varias semanas trabajando en su nuevo proyecto deportivo, pero guarda e impone un celoso silencio a los protagonistas para evitar que se conozcan detalles del mismo.
Así, aunque parece segura la continuidad de Jesús Ramos en el banquillo con el aval de sus buenos números dirigiendo al equipo en los partidos que estuvo al mando, ni siquiera la renovación del marinense, hombre de la casa, es oficial.
Lo único seguro en estos momentos son los futbolistas que cuentan con contrato en vigor. En esta situación se encuentran todos los fichajes del pasado mercado invernal como son Eneko Zabaleta, Adrián Cruz y Rufo, que firmaron por temporada y media salvo el delantero, que lo hizo para dos más. También el capitán Edu Sousa y al central Víctor Vázquez cuentan con plaza en el equipo, y siguen teniendo vinculación contractual Adighibe, Pol Bueso y Naveira, aunque no se puede dar por segura la continuidad de todos ellos.
Otro que tenía firmado un año más era Brian Jaén, pero el guardameta anunció por redes sociales que había llegado a un acuerdo con el club para rescindir su contrato, convirtiéndose en la segunda baja oficial tras el cedido Jaouad, que regresa al Leganés. Ambos se despidieron de los aficionados granates, en la única vía de comunicación pública con los seguidores desde el inicio de la alerta sanitaria.
José García era el otro cedido del equipo. Su continuidad interesaría dado el buen rendimiento ofrecido, aunque en todo caso está en manos de su equipo de procedencia, el Extremadura.
Por su parte el resto de jugadores han pasado por las oficinas del club para reunirse con el consejero encargado de la planificación deportiva, Roberto Feáns, y finiquitar el curso. Algunos han recibido por parte del Pontevedra el interés para prolongar sus contratos, otros sin embargo siguen esperando esa llamada.
En esa situación se encuentran jugadores como Bustos, cuyo caché y otros motivos más personales pueden alejarle de Pasarón, un Romay cuya renovación parecía encaminada antes de suspenderse la liga de manera abrupta, o Álex González, pieza clave en los últimos años. También Sana, Campillo, Berrocal, Nacho López, Álex Fernández, Pedro Vázquez, Santi Figueroa, Rivera o el lesionado Javi López están a la espera de conocer su futuro, que en muchos casos apunta a lejos de Pasarón. Ninguno quiere sin embargo cerrar todavía esa puerta.
En muchos de estos casos existe una predisposición para seguir vistiendo de granate en un año que se presenta con dudas a nivel deportivo pero muy emocionante, al estar en juego no sólo el ansiado objetivo de llegar a la Liga de Fútbol Profesional, sino la clasificación para la Segunda División B PRO, ya que quedar fuera de los 40 mejores equipos supondría un importante varapalo a nivel económico.