Los protagonistas de la Liga LEB Oro, paralizada indefinidamente por la crisis sanitaria del coronavirus, se han sentado a negociar cuál es la mejor manera de terminar la temporada.
El Peixe Galego, junto al los demás 17 clubes que componen la segunda categoría del baloncesto nacional, han mantenido este miércoles un encuentro virtual con los responsables de competición de la Federación Española (FEB), en el que el orden del día era tratar el futuro de la competición.
Sin embargo en este primer encuentro no se ha llegado a un acuerdo debido a las "diferentes posiciones existentes tanto entre los clubes implicados como con la Federación", ha señalado la FEB en un comunicado.
El cuadro marinense es de los que defiende la suspensión definitiva de la competición ante el perjuicio económico que supondría prorrogar los contratos de la plantilla. Sobre la mesa estaba también la medida anunciada por otras federaciones de congelar los descensos de categoría, un extremo que beneficiaría a los de A Raña pero que no está decidido.
Ante estas posiciones contrarias, la Federación y los clubes han fijado un calendario de próximas reuniones en las que intentar cerrar un "acuerdo mayoritario que permita resolver la temporada de forma satisfactoria para todos los estamentos del baloncesto español implicados en ella", señala el organismo rector del baloncesto nacional.