La continuidad en la Copa Federación se complica para el Pontevedra, después de caer este miércoles en Pasarón (0-1) ante el Cornellà en el duelo de ida de los 1/4 de final de la competición.
Aunque en el once inicial sólo repetían dos nombres con respecto al duelo del pasado domingo en Valladolid, David Castro y Campillo (sancionado en liga), Luismi apostó por una formación competitiva en la que sólo aparecía Rivera como representación de la cantera. Junto a él las nuevas incorporaciones como Álvaro Bustos y Borja Domínguez ponían un añadido de interés para la escasa afición presente en las gradas.
En frente los granates tenían un rival de nivel, el tercer clasificado del Grupo III de la Segunda B y que aunque también con jugadores con menos minutos sobre el verde, con una formación no exenta de calidad como demostraba el ex Primera División Manucho (Rayo Vallecano o Valladolid).
Con este planteamiento inicial, los dos equipos arrancaron el duelo con respeto. El dominio era local, pero los catalanes amenazaban en alguna rápida transición y pese a que el ritmo no era el de un encuentro de liga, sí se le aproximaba más a lo visto anteriormente en el torneo copero.
Borja Domínguez dejaba los mejores detalles en el juego ofensivo del Pontevedra. De sus pies nació una acción que terminó con un disparo que se marchó ligeramente alto de Pibe. El argentino se mostró también muy activo durante los primeros 45 minutos, pero sin acierto en los metros finales, como tras un despeje en largo que Rivera peleó dejándolo en franca ventaja para encarar al portero. Sin embargo se interpuso un defensor desbaratando el peligro.
La nota negativa del primer tiempo, la lesión de Álex Fernández, que en el minuto 24 pidió el cambio tras dañarse el hombro. Mala suerte para el centrocampista, deseoso de ganarse la confianza de su técnico tras varios meses fuera del equipo precisamente por un problema físico.
No pudo empezar peor el segundo tiempo para los pontevedreses. En apenas un minuto de juego el Cornellà se adelantó en el marcador a balón parado, tras una falta lanzada desde el costado derecho de su ataque al segundo palo que Uche templa de cabeza para que entre Gilbert y Carlos acabasen introduciendo el esférico en el fondo de la red.
Reaccionaron los granates en una buena combinación entre Bustos y Borja Domínguez que terminó con un disparo desde la frontal del centrocampista vigués que se marchó ligeramente alto. Pese a tener la necesidad de empatar, no se volvió loco el Pontevedra, aunque sí se desorganizó ligeramente en su búsqueda del empate.
Así lo que llegaron fueron dos opciones claras del conjunto visitante para hacer el segundo en su cuenta, ambas por medio de Gilbert. En la primera el 10 del Cornellà se plantó en carrera ante Ualoloca pero el guardameta salvó con el pie, y en la segunda opción de nuevo en velocidad pisó área pero el esfuerzo de David Castro impidió el tanto al límite de cometer penalti. Tanto se forzó que se lesionó en esta acción en su rodilla izquierda teniendo que pedir también el cambio siendo el segundo lesionado de la tarde-noche.
La opción local llegó poco después, en el minuto 76, en un penalti cometido sobre Javi Pazos que el propio delantero marinense envió a la madera.
Al final, derrota por la mínima que no hizo justicia a lo visto sobre el terreno de juego, que salió cara por los contratiempos físicos de Álex Fernández y Castro y que obligará a remontar en el duelo de vuelta del próximo miércoles 13 de febrero.
PONTEVEDRA CF (0): Ualoloca, Juan Barbeito, Nacho Lorenzo, Campillo, David Castro, Jesús Barbeito, Álvaro Bustos (Javi Pazos, min.61), Álex Fernández (Antón, min.24), Rivera, Pibe, Borja Domínguez.
UE CORNELLÀ (1): Sergio, Román (Agus, min.63), Héctor, Carlos, Chiket, Uche, Adbe, Uriol, Manucho (Eloy, min.57), Gilbert, Gaspar (Jaume, min.52).
Árbitro: Daniel García Lesta, auxiliado en las bandas por Otero Rodríguez y Pérez Carmuega (Galicia). Amonestó a Uche, Eloy y Héctor en el Cornellà.
Goles: 0-1 Carlos (min.46).
Incidencias: Partido de ida de 1/4 de final de la Copa Federación disputado en el Estadio Municipal de Pasarón de Pontevedra ante alrededor 350 de espectadores.