A los siete añosYolanda Castaño Pereiraya escribía poesía. En el colegio de Santiago en que estudiaba la ponían a recitar sus composiciones para los compañeros. Además de leer a Gloria Fuertes, le gustaba jugar a disfrazarse "ser otra, a través de los trapos", y sacar su lado coqueto. Su abuela materna era una reconocida modista en la capital gallega. Su madre, bióloga y su padre, marino mercante. Con trece años la familia se trasladó a la ciudad herculina, donde estudió Filología Hispánica.
Reconoce Yolanda en PontevedraViva Radio, que la carrera universitaria no le ayudó a ahondar en su vocación. Para cuando piso la Universidad, ya había ganado varios certámenes poéticos y tenía publicado su primer libro. En aquellas aulas, otra escritora, Luisa Castro, les dijo "el único consejo que os puedo dar es que nunca sigáis consejos", máxima que se viene aplicando. Rechaza de plano el tópico de misticismo que se pueda atribuir a los poetas, ella se confiensa más bien mundana, de pisar la calle, vamos. De vivir todo cuanto toca vivir.
Su compañero sentimental fue quien hace casi cuatro años la convenció para tener presencia en redes sociales; y aunque es activa a día de hoy, prefiere no prodigarse en muchas de ellas. Por cierto, hablando de compañeros sentimentales, afirma ser de enamorarse pocas veces, pero de forma intensa. Eso sí "hay que ser exigente previamente" para evitar decepciones, así que esta parte la ha salvado bien.
Mujer viajera, inquieta, no se ha conformado con escribir que también ha ejercido de presentadora en televisión, ha sido galerista, organiza eventos culturales y hasta ha cantado junto a Nacho Vegas. Eso de mezclar disciplinas artísticas es algo en lo que también tiene experiencia y que es su "teima", dice en La Playlist. Poesía, música, danza, audiovisual, arquitectura, cocina y ahora... cómic. 'O puño e a letra' es su último trabajo. Su último trabajo y el primer cómic poético. Cuarenta de sus poemas han sido 'reescritos' o 'redibujados' por cuarenta ilustradores gallegos.