Obras de Goya y Dalí en una exposición que representa una oportunidad "única" para ver juntos a dos "auténticos colosos" del arte. Así describen los responsables de Afundación lo que el público descubrirá en la muestra "De la razón de Goya a los monstruos de Dalí" que, desde este jueves, se puede visitar en el Café Moderno.
La exposición muestra, a través de 80 grabados de Dalí y 19 de Goya -todos ellos originales-, la revisión surrealista que el artista catalán hizo de la serie Los caprichos, creada por Goya a finales del siglo XVIII. Se trata de una muestra inédita, creada para la ocasión, y que estará en Pontevedra hasta el próximo 19 de enero.
La coordinadora del área de Cultura de Afundación, Paloma Vela, ha explicado que los pontevedreses podrán comparar en esta exposición "dos formas de entender el arte" y cómo Goya y Dalí "se asomaron a la misma pieza".
Los "caprichos" del pintor malagueño, ha recordado, eran "críticas mordaces" a la sociedad de su tiempo, centradas especialmente en la nobleza y el clero; mientras que Dalí optó por ofrecer una óptica surrealista y acercarlos a su "egocentrismo".
A pesar de ello, según ha destacado el comisario de la exposición, Julio Niebla, ambos pintores "están más cerca de lo que la gente cree" a nivel conceptual y plástico.
"Dalí es Dalí, lo que hace es jugar, provocar, ser el enfant terrible que fue durante toda su obra", ha añadido el comisario, que ha defendido que a pesar de su reconocimiento Goya "es un artista por descubrir" y, sin duda, el "padre" del arte contemporáneo. "Y Dalí lo sabía", ha dicho, por lo que "eligió bien la serie que quería reinterpretar y llevar al terreno surrealista".
En este proyecto expositivo, que nace con vocación itinerante, se muestra cómo Dalí utiliza la técnica del heliograbado para reproducir los caprichos originales añadiéndoles color, además de su característica iconografía y su imaginario surrealista.
En las reinterpretaciones que hace el artista catalán aparecen relojes blandos en alusión al paso del tiempo; las muletas y los falos alejados, símbolos del miedo a la impotencia sexual; las calaveras, en referencia a la fugacidad de la vida; las llaves, simbolizando la mente; las piedras, en referencia al paisaje de su entorno natal; o el saltón, animal por el que sentía terror.
También se aprecian claras referencias a personajes que marcaron su vida como el poeta Federico García Lorca, los pintores Millet y Velázquez o el físico Werner Heinseberg.
El único grabado que Dalí respetó íntegramente de los originales de Goya, ha afirmado Julio Niebla, es "El sueño de la razón produce monstruos", considerado por muchos críticos como una de las primeras obras surrealistas de la historia, "150 años antes del surrealismo".
Los grabados de Goya que integran esta exposición pertenecen a la colección de arte de Afundación, mientras que los originales de Dalí han sido cedidos por la Fundación Museo de Artes del Grabado de Ribeira.