"Castor no se dedica a la compraventa de vehículos, se dedica única y exclusivamente al tráfico de drogas"
Por Natalia Puga & Paula Sanmartín
El matrimonio formado por los vecinos de Mos Castor Manuel G.G. y María del Carmen C.D. tenía un nivel de vida que no se correspondía con los ingresos que declaraban legalmente y hacían continuos viajes por todo el territorio español y desplazamientos a Turquía, "una de las grandes potencias en el tráfico de heroína. Él, además, adoptaba fuertes medidas de seguridad incluso en su vida diaria, utilizaba para comunicarse móviles portugueses y se relacionaba habitualmente con personas vinculadas con el tráfico de drogas en España y Portugal.
Basándose en todos esos indicios y en el resultado de toda una serie de vigilancias, seguimientos y escuchas telefónicas, los policías de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDYCO) concluyeron que Castor Manuel se dedicaba al tráfico de drogas y que eran ciertas las informaciones que recibieron de que se dedicaba al tráfico de heroína en grandes cantidades en contacto con ciudadanos de Europa del este.
Así lo ha asegurado este miércoles el agente de la UDYCO que actuó como secretario de las diligencias de investigación que concluyeron en el año 2016 con el decomiso de un Porsche Cayenne cargado con 54 kilos de heroína valorada en 2,5 millones de euros y que desde este martes se está juzgando en la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra.
Durante su declaración este martes en el juicio Castor Manuel insistió en que se dedicaba a la compraventa de coches, pero este policía aseguró este miércoles en la segunda sesión del juicio que "Castor no se dedica a la compraventa de vehículos, se dedica única y exclusivamente al tráfico de drogas".
El fiscal antidroga de Pontevedra considera que es el máximo responsable en la provincia de una organización que se dedicaba a la introducción de droga en Galicia procedente del este Europa y este miércoles el responsable de la investigación lo confirmó en la sala y acompañó sus afirmaciones con detalles de sus seguimientos a los acusados tanto en Galicia como en Barcelona, que les permitieron acreditar encuentros sospechosos entre ellos.
La segunda sesión del juicio comenzó con la declaración de dos de los seis acusados a los que no dio tiempo a declarar durante el primer día de la vista oral. Ambos, José R.R. y Marcos Antonio G.B., considerados "el último eslabón" del grupo de narcotraficantes, tan sólo respondieron a las preguntas de sus abogados defensores y negaron los hechos que les atribuye el fiscal.
Marcos reconoció que conoció a Castor Manuel y María del Carmen, pero a los acusados albaneses Sokol R. y Rinush G. La relación venía porque le compró al primero un vehículoo Seat León y, como el coche dio muchos problemas, seguión manteniendo contactos con él.
Los seguimientos policiales lograron interceptar conversaciones en las que hablaban de "los turcos", a lo que Marcos explicó que se refería a unos vecinos de Noia a los que compraban vieiras en una operación en B que realizaba para complementar la jubilación que recibía de su etapa como agente de la Guardia Civil -18 años-.
José R.R., con antecentes penales por hechos relacionados, también reconoció conocer a Castor y su esposa, pero niega cualquier relación con el tráfico de drogas, pues, desde que salió de prisión, "me di de alta en la actividad de compraventa de coches y me dedico a eso". Asume "encuentros casuales" con él, pero no haber concertado citas.
Rinush G. se enfrenta a la pena más elevada, 18 años de prisión por narcotráfico y falsedad. Para Castor Manuel el fiscal pide 17 años y para su mujer, 15 años para su mujer. También reclama una condena de 11 años para el albanés Sokol R. y los gallegos José R. R. y Marcos Antonio G. B..
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