Poio presenta un presupuesto "expansivo" de casi 12 millones de euros
Por Anxo Lourido
El presupuesto de Poio para 2018 llega a 11,97 millones de euros, incrementando en 854.000 euros, un 7,68%, el montante del presupuesto municipal de 2017.
El alcalde Luciano Sobral, acompañado por la teniente de alcaldía, Chelo Besada y por el concejal de Facenda, Xulio Barreiro, explicaba que se trata de un presupuesto "expansivo", orientado a garantizar los servicios básicos de la población. Chelo Besada alertaba de la importancia que el gobierno local da a las partidas relacionadas con la sanidad, educación y cultura, además de a los servicios sociales garantizando que todos los vecinos tengan garantizadas las necesidades básicas.
Barreiro añadió que se trata de la propuesta presupuestaria que aporta más recursos propios en las últimas décadas, un dato que entienden que se corresponde con el crecimiento económico social y demográfico del Concello. Actualmente Poio supera la cifra de 17.000 habitantes.
En este sentido señalan, desde el grupo de gobierno, que la política económica de los años previos a la crisis económica ha evitado que se redujeran los servicios durante estos años ya que el Concello contaba con un remanente de tesorería próximo a los 6 millones de euros. Luciano Sobral destacó que se mantienen congeladas las tasas y se rebaja la deuda municipal en más de 500.000 euros. En este sentido, el concejal de Facenda recordaba que en los últimos siete años se ha rebajado en más de tres millones de euros la deuda de las arcas municipales, por debajo del 46%.
INVERSIONES
La previsión en inversiones asciende a 896.000 euros, un 152% más que en el año anterior. Entre las principales apuestas se encuentra la ampliación del cementerio municipal, que contará con una partida de 280.000 euros. Para el patrimonio histórico se invertirán 195.000 euros mientras que 60.000 estarán destinados a saneamiento. 140.000 euros se invertirán en carreteras.
GASTOS
En el capítulo de gastos, el gobierno local critica la regla de gastos que impone a los ayuntamientos el Gobierno central de Mariano Rajoy. Es una medida que consideran absurda y que limita las posibilidades de avance de los gobiernos locales.
En este sentido, los gastos de personal previstos para 2018 apenas varían respecto a 2017 y se recoge el incremento de las retribuciones aprobadas por el Gobierno para los funcionarios de un 2%, ascendiendo a 65.000 euros.
Los gastos corrientes superarán el 3,6%, alcanzando un 52% del presupuesto. Por su parte, los gastos financieros se reducen un 21% debido a la reducción del capital pendiente de pago a entidades bancarias.
INGRESOS
Los impuestos directos supondrán un ingreso de 4,47 millones de euros, alcanzando el 37,4% del presupuesto. La mayor recaudación del IBI debido a la regularización catastral y al impuesto de vehículos de tracción mecánica conlleva este incremento, que supone un incremento de 17,8% respecto a 2017.
Los impuestos indirectos establecen unos ingresos que pasan de 70.000 a 115.000 euros, como consecuencia de las estimaciones realizadas en relación con la recaudación del pasado año. Se nutre sobre todo del impuesto de construcciones y obras. En este sentido, Luciano Sobral espera que se desbloqueen promociones inmobiliarias que llevan alrededor de cinco años retrasadas y que afectan a 300 viviendas.
Por su parte las tasas y precios públicos alcanzan los 3,4 millones de euros, el 28,3% de los ingresos. Las partidas con mayor variación son las de licencias urbanísticas (10.000 euros), la tasa por expedición de documentos (8.000 euros), sanciones (20.000 euros) y facturación de agua (22.500 euros).