Los trabajadores de los hospitales de Pontevedra, en pie de guerra por la movilidad interna
Por Mónica Patxot & Anxo Lourido
Llega un septiembre tenso en las relaciones entre los trabajadores de los hospitales públicos de Pontevedra y la gerencia de la Estrutura Organizativa de Xestión Integrada (EOXI) ante la decisión de no contemplar las resultas en la propuesta de administración de la movilidad interna.
La Xunta de Persoal, con la presidenta Carmen Revenga al frente, exponía este viernes su postura de oposición a la oferta realizada por la gerencia. Los representantes de los trabajadores reclaman que los puestos que quedan sin ocupar tras el proceso de acoplamiento salgan como plazas a concurso a mayores de la movilidad. De esta forma evitarían situaciones de provisionalidad y que la dirección concediera las plazas de manera discreccional "para dárselas a quen lle pete".
Revenga, en nombre de todos los sindicatos con representación en la Xunta de Persoal, señalaba que la movilidad interna es la forma que tienen los trabajadores, salvo los facultativos, de cambiar en el puesto de trabajo dentro de los distintos servicios de los hospitales y debe hacerse cada dos años como se recoge en las bases establecidas por el Servizo Galego de Saúde. Desde la Xunta de Persoal quieren que todas las plazas puedan ser elegidas de forma voluntaria por el personal fijo.
El 5 de septiembre mantendrán asambleas tanto en Montecelo como en el Hospital Provincial para decidir si inician un calendario de protestas contra la posición de la gerencia que, según los representantes sindicales, se niega a aceptar las propuestas de la Xunta de Persoal porque carecen de un programa informático para desarrollar esta iniciativa.
Los trabajadores llevan cinco años sin aplicar esta movilidad interna, según los sindicatos, por los cambios continuos en la dirección de Recursos Humanos. Han cambiado cuatro veces de directores en este departamento durante el último lustro.