Roberto C. Agís Balboa
Llega el progreso a Sanxenxo
Desde hace décadas, Sanxenxo es un referente a nivel turístico, gallego y nacional, tanto, que son muchos aquellos que ansían gobernar dicha villa marinera. No es menos cierto, que son muchos los que nos visitan, gentes de todas partes, de todos tipos y colores, y de todos los bolsillos, batiendo records cada año. Sanxenxo tiene gancho, sea el que sea, pero atrae año tras año, generación tras generación, a miles y miles de personas. El tiempo pasa, y mientras los nativos como foráneos que nos visitan envejecen, Sanxenxo también cambia y evoluciona. El problema quizás, es saber o tener claro, ¿hacia dónde o hacia qué? Algún día, alguien seguro dará con la solución a dicho dilema. Dichoso el iluminado…
Como bien sabemos el mundo de la política se parece al real (de realidad, no de realeza), tanto como una gallina y un limonero. Sanxenxo es una marca y tiene un color especial como dice la canción, y si señores, vende mucho, tanto como muchos diarios de tirada nacional. En términos de guerra sería un punto estratégico, una plaza a conquistar, aunque por tamaño poblacional solo sea un pueblito. Por lo tanto, a muchos les interesa Sanxenxo y lo que aquí pasa y hace. Sanxenxo es conocido, mucho más de lo que pensamos y creemos. Se podría ver a Sanxenxo como algo ansiado por muchos y codiciado por más, un Grial de la política (o una caja de pandora que hay que saber mantener en equilibrio).
Este año de seguro pasarán muchas cosas, o más bien ya están pasando. El año que viene serán las elecciones municipales y después de las pasadas creo estas serán aún más sorprendentes ¿Qué nuevas sorpresas nos esperan? ¿Cuantos partidos, colores, ideologías, popurrís, concurrirán a las elecciones? ¿Cambiará el gobierno o seguirá el mismo? ¿Volverán los fantasmas del pasado? ¿Y si Pepe decide dejar de echar sal a sus comidas, pero lo apoyan los ciudadanos? ¿Y si una marea no puede con los nacionalistas, se quedan solos los socialistas, y suben los independientes? ¿Habrá izquierdas y derechas, derechas mancas, izquierdas bípedas o centros totalitarios? Uy, se me da que es muy temprano para conocer un futuro incierto pero cierto como tal.
Hubo una época, hace largo tiempo, Sanxenxo no era nada más que campos, playas desiertas, y bosques. Luego vino su iglesia y unas casitas, los veraneantes, turistas, crecimiento, llegó el progreso,… Muchos proyectos están latentes como esperando salir y darse a ver en el momento oportuno, otros guardados en cajones o perdidos de la mano de Dios, algunos son imposibles, otros faraónicos, hay proyectos económicos, culturales, musicales, ambientales… Si, son muchos proyectos ¿verdad? ¿Se llevarán a cabo? ¿Por quién? ¿Cuando? ¿Por qué? ¿Con qué dinero? ¿Algún interés general o particular? Uy, uy, uy, menudo bienio nos espera, como algunos apliquen el lema "Tanto monta" de Fernando el Católico aquí puede pasar de todo. Ya dice el Sr. Edgar Morin "La política es el arte de lo incierto, lo que nos lleva a un principio de incertidumbre política generalizada"