Félix Hernáez Casal
Ejercicio de honradez para cerrar el telón
Era muy difícil. Durante la semana se intentaron ofrecer datos desde dentro y fuera del equipo para tratar de convencerse de que existían opciones y que no estábamos ante un imposible. Sin embargo, más allá del objetivo casi quimérico de darle la vuelta a la eliminatoria, el partido de la Nueva Condomina ofrecía otra posibilidad más real y plausible para el Pontevedra CF, completar un partido serio y responsable para terminar esta gran temporada con el mejor sabor de boca posible.
Y esta misión (insisto, más acorde con la complicadísima situación que se dibujó tras el partido de ida) se cumplió realizando un encuentro sobrio en el que se derrochó esfuerzo, honradez y en el que incluso pudo soñarse un poquito tras marcar Eneko Eizmendi un gol muy bonito que abría en ese instante el camino de la esperanza.
La realidad, por desgracia, es tozuda, suele dejar poco margen para las sorpresas y el Real Murcia no perdió los papeles tras ese tanto de Eneko. Aguantó el tirón con serenidad para aprovechar en el tramo final del choque las urgencias granates para empatar el partido primero y disfrutar de grandes ocasiones después (entre ellas un penalti parado por Edu) para poder ganar el partido.
Se podría discutir acerca de cuál era la intención del Pontevedra en ataque al alinear como hombres más adelantados a Iker Alegre (fuera de sitio todo el partido) y Eneko Eizmendi (mucho más activo y protagonista en estos tres últimos encuentros que en todos los anteriores disputados desde su llegada). También podría hablarse sobre si era conveniente o no volver a jugar sin referencia en ataque al dejar a Mateu en el banco o si la suplencia de Abel y la titularidad de Mouriño constituyó un acierto del técnico.
Lo cierto, no obstante, es que la empresa que tenía el equipo por delante era de una dificultad extrema y que todos los jugadores que ayer saltaron al césped hicieron bueno el lema famoso del "nunca se rinde", con sus limitaciones trataron de resistirse con todas sus fuerzas a un destino que parecía marcado desde el partido disputado en Pasarón.
Algunos pueden pensar qué habría pasado si Eneko hubiera transformado la única ocasión (única sí, pero muy clara) de gol disfrutada en el primer tiempo tras pared exquisita entre aquel y un Jacobo Millán que volvió a poner detalles de calidad sobre el terreno de juego. Otros podrían argumentar que si el colegiado hubiese señalado el penalti en área murciana por mano aparentemente clara y Bonilla lo hubiera transformado, ese tiempo de prolongación habría sido intensísimo.
El caso es que en ningún momento a pesar de la dignidad mostrada por los nuestros se dio la sensación de poder alcanzar la gesta y que el Murcia controlaba la situación con el oficio y la categoría que ofrecen las posibilidades presupuestarias.
Y ese aspecto (el presupuestario y las posibilidades que ofrece el dichoso dinero) es el que una vez apagados en unos días los rescoldos de esta eliminatoria va a centrar la actualidad del Pontevedra CF durante las próximas semanas. ¿Cuáles serán las aspiraciones marcadas por el Consejo para la campaña 17/18? ¿Se dará un paso más o el objetivo será similar al de esta que acaba de finalizar? ¿Se escapará por no haber negociado con antelación algún jugador de aquellos con los que el club quiere contar para el futuro?
Estas incógnitas y algunas más tendrán que ser despejadas para saber si este camino de continuo crecimiento que el equipo ha experimentado en los tres últimos años va extenderse o sufrir un estancamiento. Lo que está claro a día de hoy es que Kevin Presa es el único jugador con contrato en vigor y que Barco regresará al CD Lugo y Eizmendi al Albacete al expirar sus cesiones. Al margen de estos jugadores cedidos, no creo ir muy desencaminado al afirmar que existen varios integrantes de esta plantilla cuya continuidad resultaría muy interesante. Hombres como Trigo, Bonilla, Miguel, Bruno, Edu, Abel o Añón han resultado cruciales este año y Alegre ha demostrado mucha clase en los "tres ratos" que ha podido jugar por culpa de su lesión.
Sin duda casi todos ellos dispondrán de ofertas además de la nuestra y no es descartable que como pasara con Borjas el año pasado el club llegue en algún caso tarde a la hora de atar su continuidad a este proyecto. Se quede quien se quede tampoco se puede negar que hay determinadas posiciones en la que el equipo debe ganar en madurez y enteros. Un central experto y contundente, algún centrocampista jugón y (tras la marcha de Barco) un '9' referente y goleador son puestos que deben cubrirse de manera 'impepinable'.
Todas estas cuestiones vitales y de gran trascendencia empezarán a ventilarse en pocos días pero esta noche en la que escribo estas líneas tras la eliminación en Murcia toca el agradecimiento a un grupo que ha derrochado desde el mes de Agosto todo su esfuerzo y dedicación para con esta camiseta y este escudo hasta volver a colocar al Pontevedra CF en un play off de ascenso a 2ª división.
Ojalá que esta clasificación no se convierta en una anécdota con el paso del tiempo sino en un paso más en la recuperación definitiva de la entidad para afrontar en poco tiempo la vuelta a esa categoría de plata que de manera tan absurda abandonamos hace más de una década y que tanto necesita la institución para florecer de la forma en que se merece.