Llevamos unos meses con el taller de pintura de Mukina y la familia pinturera y estamos más que contentos. Es una actividad en la que nuestra hija se relaja, se concentra en su lienzo, en sus dibujos, en los que disfruta con el CD de Mukina de fondo durante la clase, que se divierte con los profes que la miman y le enseñan, es la benjamina del grupo.... está como una reina. Seguiremos en verano con este taller en la que se suprime el horario de sábado de tarde en verano y la incluiremos al de una tarde entre semana, semanas alternas. Hemos descubierto otra faceta artística de nuestra hija que nos entusiasma. En casa a menudo pinto con ella durante horas con acuarelas, su padre nos imprime hojas con dibujos para colorear y nosotros lo pasamos de lo lindo juntas. También tiene una pequeña pizarra desde navidades y que ha resultado ser todo un éxito, sobre todo la parte de los rotuladores.
En el último curso he visitado un par de escuelas en las que se supone que los niños toman contacto con la música de una forma gradual, pero si bien la primera clase me pareció escasa en contenidos y demasiado light, puesto que se dedicaban a cantar bailar y poco más, las profes eran un verdadero encanto y seguramente con 3 años mucho más no se podría hacer pero supongo que mi idea precio-clase no se correspondía. Algo parecido me pasó en la siguiente Escuela, en la que me dijeron que tenían un proyecto propio de enseñanza de música, que era novedoso que era, que era,... siento decirme que hasta mi hija de 3 años y medio me dijo, mamá, me quiero ir. No solo no cantaban, pintaba la mitad de la clase y la otra mitad hacía ruido y barullo con los instrumentos de la clase. De nuevo me quedé desilusionada, no era la idea que tenia. Eso todo lo hacemos en casa, ¿qué padre no hace con sus hijos ese tipo de cosas?¿ en serio hay que pagar para que alguien lo haga por nosotros?.