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Iniciar un negocio y seguir cobrando el desempleo
Cuando uno se queda sin trabajo y bajo el manto protector de la prestación contributiva por desempleo tiene una cierta tranquilidad sobre que durante unos meses algún ingreso va a tener, y la zozobra de que esos ingresos terminan en una fecha bien determinada. Hay que buscar un empleo por cuenta ajena o iniciar una actividad por cuenta propia antes de llegar a esa línea roja de carencia de ingresos propios.
El monto correspondiente a la prestación de desempleo puede ser aplicado como apoyo al inicio de una nueva actividad mediante un procedimiento que se denomina de capitalización. La prestación de desempleo se convierte así en capital, en líquido, cuyo único destino posible es hacer frente a gastos de la nueva actividad laboral, gastos que deben ser escrupulosamente justificados en función de un proyecto.
Existe desde hace más de un año, expresamente reflejada en el Estatuto del trabajo autónomo, una segunda opción: seguir cobrando la prestación por desempleo mientras se inicia una actividad como autónomo o una incorporación como socio de una sociedad laboral de nueva creación o socio trabajador de cooperativas de trabajo asociado de nueva creación.
Eso sí, tal compatibilidad se limita a un máximo de 270 días o el tiempo inferior pendiente de percibir (si uno tiene más prestación por desempleo acumulada, la pierde), con el único requisito de solicitarlo a la entidad gestora en el plazo de 15 días a contar desde la fecha de inicio de la actividad por cuenta propia, sin perjuicio de que el derecho a la compatibilidad de la prestación surta efecto desde la fecha de inicio de tal actividad.
Si se desempeña en ese tiempo de compatibilidad trabajo por cuenta ajena (aunque sea a tiempo muy parcial) el derecho finaliza. Aquí el Estado no controla en qué se emplea el dinero, puede ser en la actividad, en el supermercado, o en el bingo, cada beneficiario decide qué hacer con él.
No pueden optar a esta compatibilidad aquellas personas cuyo último empleo haya sido por cuenta propia...
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